Trasplantes por el camino de la solidaridad en un instituto de Marchena

Trasplantes por el camino de la solidaridad en un instituto de Marchena

Quienes saben de trasplantes, cuentan con que la educación es el principal camino para concienciar a una sociedad sobre la necesidad de donar órganos. Y ninguna persona está más preparada para transmitir este mensaje que quienes lo han vivido en primera línea. Eso pasa con Jerusalén y Adeli, dos jóvenes trasplantadas que van de la mano del doctor José Pérez Bernal, cada vez que se tercia. En este caso ha sido en un instituto de Marchena, el IES López de Arenas.

El doctor ha dado yan más de 2.000 charlas en este sentido. Principalmente lo hace en centros educativos donde el alumnado queda tan impresionado que, a veces, toman decisiones que conducen su vida.

Estudió Medicina después de oír historias de trasplantes

Así es como una alumna del IES López de Arenas de Marchena, la última vez que impartieron charlas sobre trasplante en este centro, decidió estudiar Medicina, y lo consiguió. Son pequeñas anécdotas que se repiten a lo largo de un recorrido que realiza Pérez Bernal desde que se jubiló después de haber pasado 43 años tratando a personas que necesitaban un trasplante.

Porque este profesional, director de trasplantes en el Colegio Médico de Sevilla, convence porque habla de historias humanas, de superación, de segunda oportunidades. Y lo hace con pasión, con el convencimiento de haberlas vivido en primera persona. ¿Y saben qué? Tiene una memoria prodigiosa que repite nombres y fechas de nacimiento, o mejor dicho de renacimiento, de personas trasplantadas desde hace años, con su trayectoria, la dureza de su situación antes de que llegara el órgano. Pero, sobre todo, habla de la esperanza con la que prosiguen, con proyectos antes imposibles.

Dos jóvenes trasplantadas

El doctor se pone delante del alumnado para exponerles casos concretos. Y siempre va acompañado de personas que han pasado por la experiencia del trasplantes. Al instituto de Marchena acudió con Jerusalén y Adeli, dos jóvenes de la comarca, de Osuna y Arahal respectivamente.

La primera lleva 8 años trasplantadas de riñón, es maestra y le encantan los niños. Se cuida hasta la extenuación porque valora cada minuto de una nueva vida que cambió por otra en la que no podía viajar y debía permanecer 8 horas pegada a una máquina para limpiar su sangre (diálisis).

Adeli fue trasplantada hace un año de ambos pulmones. Ya llegó al mundo con una enfermedad, para ella genética, denominada fibrosis quística. Una frase define el cambio que ha dado su vida. «He estado de viaje, algo que antes no podía hacer, y cuando llegaba la noche estaba cansada de hacer cosas, antes estaba agotada sólo por intentar respirar».

No te lleves al cielo…

Por estas historias, que relataron en el IES López de Arenas, Pérez Bernal siempre cuenta con su presencia. Los jóvenes presentes en la sala ven en vivo y en directo cuál es la continuación de estas historias de donación de órganos.

Y, además, sorprenden con sus preguntas porque, al menos en el centro marchenero, la profesora de Religión, Adelina Gago, los ha preparado para que pregunten todas las dudas sobre un tema que, como decía otro doctor, Miguel Ángel Gómez Bravo, Jefe de Sección de la Unidad de Hepatopancreática del Hospital Virgen del Rocío, debe hablarse entre las familias, en la mesa de camilla.

Mientras, con estas charlas seguirán convenciendo a las nuevas generaciones que donar órganos es «donar vida» o lo que es lo mismo «no te lleves al cielo lo que necesitamos aquí». En esta ocasión el título era ‘Trasplantes, la solidaridad como fuente de vida’ y, no dudan de que este es el camino de solidaridad por medio del que se conseguirá que se multipliquen los 87 trasplantes realizados en 2018.