Paco Rodríguez se prepara para vestir a la mayor parte de las vírgenes de Hermandades de Arahal

Paco Rodríguez, vistiendo a la Virgen de los Dolores de la Hdad. de la Misericordia. Foto: José María Gamboa

C. GONZÁLEZ @verbigracia_6

Fotos: José María GAMBOA

Paco Rodríguez Lozano se afana en su peluquería pensando ya que está cerca uno de sus trabajos más importantes del año: Es el vestidor de la mayor parte de las vírgenes, imágenes titulares, de las Hermandades de Arahal, todas excepto de la del Santo Entierro. Es su pasión y lleva cumpliendo como un reloj desde hace 25 años, a partir del sábado, serán 26.

Paco Rodríguez espera con impaciencia que llegue el sábado. Este día, sobre las 8 de la tarde, vestirá a La Piedad, de la Hermandad de la Veracruz. Y a esta imagen les seguirán la Virgen de las Angustias de la Hermandad de la Esperanza, el lunes, la Virgen de los Dolores de la Hermandad de Jesús Nazareno, el martes, y, por último, la Virgen de los Dolores de la Hermandad de la Misericordia.

El vestidor no tiene en mente cómo pondrá la saya, el cíngulo, tocado o el manto. Lo hará como siempre, siguiendo su propio instinto, mirando a la cara a la Virgen y hablando con ella. “Yo no veo una imagen, veo a una persona”, dice. Por eso la piropea, le cuenta sus cosas, la mira frente a frente como poca gente lo ha hecho durante las dos horas que dura esta tarea. En cada Hermandad cuenta con dos camareras a su disposición y, en todas, está siempre cerca su mujer, Armanda Lobato, de hecho es una de las camareras en la Misericordia.

Paco Rodríguez dice que será vestidor de estas imágenes mientras le quede el último aliento. Por eso sabe que no hay excusa que impida su pasión. Ni siquiera la merma que ha hecho en su cuerpo el infarto que sufrió hace unos meses. Paco parece que vive por y para este trabajo, en los genes tiene una rama artística que incluye también la restauración de enseres de la iglesia durante años, esta web le hizo un reportaje durante la Semana Santa de 2014, cuando cumplió su 25 aniversario como vestidor y la Hermandad de la Misericordia quiso rendirle homenaje.

Empezó en Arahal en mayo de 1989, pero el origen de esta pasión se inició en Morón cuando una amiga le propuso vestir a la Virgen de las Angustias, en una Hermandad que estaba reorganizándose después de un periodo de abandono de la actividad, al del Santo Entierro. Entonces tuvo que pagar 20 duros para colaborar con la reorganización.

Foto: José María GAMBOA.

Ya en su pueblo, Rafael Martín, entonces Hermano Mayor de la Misericordia, le propuso ser vestidor de la Virgen de los Dolores, aunque él ya sabía que se lo iban a pedir. Cuenta, como si fuera algo natural, que se lo dijo el Cristo de la Misericordia. La fe hace que cada paso que da Paco Rodríguez tenga sentido. Y la naturaleza le ha dado el don artístico para ser capaz de aprender sin necesidad de maestros; el tiempo además le ha ofrecido la oportunidad de enseñar la técnicas del bordado a quienes han tenido interés. “Nunca llevo una idea preconcebida, cuando me pongo a vestirlas, todo va saliendo con naturalidad”, cuenta.

25 años han dado de sí muchas anécdotas pero cuenta una que lo hace reír casi sin parar. Fue un año que vestía a la Virgen de las Angustias y estaba un niño presente. Preguntó por qué San Juan Evangelista estaba tan quieto y le dijeron que no quería moverse por miedo a que Paco lo pinchara con un alfiler. Hubo un momento en el que se quedó sólo con la imagen y entonces el niño le dijo bajito, tocando su hombro: “Ya puedes moverte que se han ido todos”.

Son historias de fe. Historias de tradición y cultura. Historia de vida guiada por la pasión de saber que el respeto se mide mirando a la cara, con el cariño que merece ver la imagen desde tan cerca.  Y lo hace durante todo el año porque las imágenes se cambian de ropa en cada celebración religiosa: Difuntos, Día de la Inmaculada, Cuaresma, Pentecostés y todas las celebraciones religiosas especiales de cada Hermandad, como Triduos o Quinarios. También ha vestido a la Virgen de Montemayor, Santa María Magdalena y, en el último verano, a la Virgen del Carmen.

Paco espera con impaciencia que llegue el próximo sábado. La primera de las iglesias visitadas será la Veracruz, su imagen de La Piedad es la primera en salir el Miércoles Santo, después de la Sagrada Entrada de Jesús en Jerusalén. Cuando esté en la calle seguirá mirándolas con la complacencia de haber compartido con ellas tantas y tantas horas, de cerca, tanto que siente su aliento.