Connect with us

Arahal

«No cobro dietas y mi sueldo es más de 400 euros inferior al de profesor, por eso me dicen que soy tonto»

Es el alcalde que más tiempo ha ocupado este cargo en la historia de Arahal, acaba de empezar su cuarto mandato al frente de Adelante IU

«El problema es que la figura del alcalde es difícil de sustituir y más en nuestra Andalucía profunda donde el alcalde tiene una importancia tan grande entre la población»

"No cobro dietas y mi sueldo es más de 400 euros inferior al de profesor, por eso me dicen que soy tonto"

«No cobro dietas y mi sueldo es más de 400 euros inferior al de profesor, por eso me dicen que soy tonto»

[labradores_campina_nuevo]

Miguel Ángel Márquez González (Oyonnax, Francia, 1968) tiene un récord: ser el alcalde de Arahal que más años se ha llevado en el cargo. Se han cumplido los primeros 100 días en su cuarto mandado al frente de un pueblo al que encontró con una importante deuda en sus cuentas municipales, y a punto de sumergirse en una crisis económica que azotó España y que traía diariamente a su despacho a familias desesperadas buscando trabajo. Reconoce que fueron años difíciles, en los que tenían las manos atadas por la falta de dinero destinado a todo lo que necesitaba la localidad.

Más de doce años atrás, la situación política ha cambiado, más a su favor todavía. Adelante IU barrió en las pasadas elecciones de mayo de 2019, superando su propio techo con la obtención de 13 concejales. La oposición se quedó con cuatro, tres del PSOE y uno del PP, éste último entra de nuevo en la escena política y lo ha hecho «animando el debate político», tal como reconoce Márquez González, pero ésto no influirá, dice, en su gestión.

-Hemos sobrepasado los 100 días de su cuarto mandato como alcalde, un mandato en el que ha conseguido más concejales que en ninguno, sin embargo con un cambio en la oposición. ¿Cree que estos cuatro años van a ser más complicados?

La acción de la oposición no me complica el gobierno ni la gestión del día a día ni los proyectos a largo plazo que tenemos encomendados por la población. Lo único que significa es que una oposición más activa anima el debate político, pero no por eso significa que sea un mandato más complicado, lo complicado y lo que desgasta mucho es la gestión del día a día, sacar los proyectos adelante, buscar financiación y convencer a la gente. 

Por ejemplo, soy el primero que quiero sacar adelante la pista de atletismo pero para que el Ayuntamiento llegue a un acuerdo con los propietarios del terreno tienen que darse unos pasos previos. Uno de ellos, la aprobación definitiva del PGOU, y cada una de las gestiones  sacarlas adelante suponen la misma vida, es perderse en los vericuetos burocráticos administrativos de la Junta y eso desgasta. Convencer a la población de lo que vivimos aquí en el día a día y que no ve, pero sufrimos y padecemos, también me resulta complicado, que la oposición haga su trabajo no. La burocracia rampante que llevo 12 años sufriendo; desde el 2007 a 2019 he visto cada vez hay más burocracia y más difícil de cumplir, encima hay que tener en cuenta la disponibilidad de los trabajadores que no siempre es la que necesitas para sacar adelante un expediente. 

– ¿Se está refiriendo a lo que ha pasado con la interventora y el problema con la presentación de las Cuentas a la Cámara Andaluza?

Desde 2018 a veces no hemos tenido todo el tiempo a la interventora, a veces una vez a la semana. Sortear esas dificultades, agota. 

-Sí, pero el ciudadano de a pie o las empresas no puede poner una excusa como esa. Un empresario, aunque lleve las cuentas de su empresa al día, si no las presenta a Hacienda hay sanción. El Ayuntamiento puede tener una buena gestión pero las cuentas debieron ser presentadas en la Cámara andaluza 

La empresa depende de sí misma, con los plazos marcados legalmente. Tanto el Gobierno como la Junta tienen también competencias que les permiten disponer de soluciones de las que tenemos en los ayuntamientos. Hay una arquitectura legal entorno a nosotros que no decidimos, se nos impone y la tenemos que acatar sí o sí. Para acatar el PGOU hemos tenido que ir a tres aprobaciones provisionales y cada una está sujeta a informes sectoriales de administraciones. Si respondieran como dice la ley, todo sería perfecto y no es así. Por ejemplo, la dirección provincial de Carretera tiene un mes para responder al requerimiento de planeamiento de cualquier ayuntamiento de Andalucía, pero no lo hace. Aquí no pasa nada, la mayoría de mi tiempo es ir a las distintas administraciones para presionar a unos y a otros y  al final, lleguen todos los informes.

Ésto puede sonarle a la sociedad a excusa.

Pero no puedo hacer nada. Hasta que no tenga todos los informes sectoriales, no puedo seguir tramitando, puedo quejarme, elevar una queja que irá contra el trabajador de turno, y puede que no tenga la culpa, porque de hecho está ocurriendo que hay tal escasez de personal que se le acumulan los expedientes sin poderlos responder.

 

El alcalde de Arahal, Miguel Ángel Márquez, el día que volvió a coger el bastón de mando de Arahal en la constitución de la última corporación municipal.

-Volviendo al tema de la intervención municipal, si un interventor se da de baja ¿no lo sustituye nadie?

Antes, cuando un interventor, habilitado nacional, faltaba se podía nombrar a un interino, pero ahora la Dirección General de Administración Local de la Junta de Andalucía tiene que emitir un dictamen favorable, lo que lo complica muchísimo. El secretario o interventor son figuras que necesito día a día porque sin su firma no se hace nada. La Diputación te mandan uno para determinadas cuestiones como, por ejemplo, el pago de las nóminas, pero no para otros asuntos que tratamos diariamente. Es lo que pasó aquí después de las elecciones, la interventora accidental la llamaron para operarse y de golpe me encuentro que no puedo pagar nóminas ni nada.

-El portavoz de IU, Javier Avecilla, dijo que el alcalde había pedido en numerosas ocasiones que se presentasen estas cuentas.

Todas las cuentas nuestras están liquidadas en plazo, en el mes de marzo. Los presupuestos se aprueban en el mes de noviembre. Las liquidaciones de los últimos años son positivas, con los informes favorables de los interventores nuestros, que son funcionarios que no se van a jugar la vida si las cuentas no son favorables. Todo los indicadores económicos previstos en la ley son positivos. Es verdad que una vez se aprueba, hay que remitirlo a una comisión especial de cuenta, publicarlo y remitirlo a la Cámara Andaluza de cuentas. Las 2016 pasó por la comisión especial de cuentas, y fue publicada en el BOPA. Pero volvemos a los problemas de interventora, se va la interventora a otro destino, solo contamos con ella los cuatro primeros meses del año en los que tiene que liquidar el presupuesto del año anterior, lo hace antes de irse. Después cuando vuelve, ya viene como interventora en acumulación, porque su plaza es en La Algaba y viene una vez en semana.

-¿No puede tener el ayuntamiento de Arahal una interventora los cinco días a la semana?

Hace falta que un interventor de los pocos que hay quiera venir a Arahal y ocupar la plaza. No quiero nombrar a un interino porque la experiencia en este ayuntamiento en el pasado con los interinos ha sido muy mala.

– ¿Es decir que los interventores eligen ir a ayuntamientos grandes donde pagan mejor?

Efectivamente.

-Y qué pasa entonces con todos estos ayuntamientos que son muchos más pequeños que Arahal, ¿tiene el mismo problema?

Depende de la circunstancias de cada uno, porque lo mismo si vive cerca le puede convenir. Lo que es cierto es que hay muy pocos interventores y el gobierno debería sacar más plazas a nivel nacional de interventores porque el gasto corre a cargo del ayuntamiento. Pero es la administración central la que saca oposición; la FAM debiera pedir convocatoria de más interventores para cubrir los ayuntamientos en un porcentaje razonable, que ahora no lo es.

-Es la primera vez que entra como diputado, algo que ha rechazado en otras ocasiones, ¿Por qué ahora sí? ¿Suena a despedida?

Y que sigo rechazando, pero no suena a despedida. La gente piensa que ser diputado es ascender en grado pero no, lo que hace es quitarme tiempo para dedicarlo a Arahal. Aunque desde el punto de vista personal me puede venir bien porque aprendo nuevas circunstancias políticas.

-¿Se puede trabajar por Arahal de otra manera desde la Diputación?

Tienes una visión más provincial y te das cuenta que los problemas que tienes aquí se ponen encima de la mesa junto a otros ayuntamientos y no del mismo color. Allí nos damos cuenta de que los alcalde del PP, del PSOE e IU acabamos teniendo los mismos problemas, los habilitados, la aplicación de las leyes. Te permite acceder a un cuerpo normativo distinto al que tienes aquí, o leyes que no necesitas, te da otra visión política más amplia.

-Pero ¿sigue sin gustarle ser diputado?

No, porque me hace estar en dos sitios a la vez y el que mucho abarca poco aprieta.

-Es el alcalde que más tiempo ha estado en el cargo, ¿no cree que se contradice repetir tantas veces candidatura con la forma de trabajar de IU que llevan a gala no tener apego al cargo? Seguro que hay una razón de peso por la que ha continuado, ¿cuál es?

Estoy absolutamente convencido de que a la política hay que llegar desde un trabajo anterior. Desempeñas durante un tiempo tu tarea política, y te vuelves a tu trabajo, así lo voy a hacer yo como muchos cargos de IU, Anguita, Maillo o Engrancia Rivero (Diputación Provincial). Cuando termine, volveré a mi trabajo de profesor de francés.

-Casi cerca ya de la jubilación…

Bueno tengo 50 años, teniendo en cuenta que los profesores se pueden jubilar a los 60, todavía me queda tiempo para demostrar que vuelvo a la enseñanza, sin lugar a dudas. 

– Esta vez que se ha presentado, en algunos círculos había dicho que estaba cansado y quemado y que era hora de irse, que estaba más cerca de irte que de quedarse. ¿Por qué al final decidió presentarse? IU no podía perder esta plaza de Arahal que es importante.

No, por eso no. No he sentido presión de nadie del provincial ni del andaluz para que tomara la decisión de presentarme, entre otras cosas porque todo el mundo lo entendería si yo me voy, precisamente en aplicación de esos criterios que tenemos en IU. El problema es que la figura del alcalde es difícil de sustituir y más en nuestra Andalucía profunda donde el alcalde tiene una importancia tan grande entre la población. 

– Entonces, ¿ha sido una cuestión de compromiso político?

Internamente se valoraba si era necesario o no que me presentara. Es verdad que con esos criterios que te he dicho, mi deseo es volver al instituto, lo he dicho en estas elecciones pero también en las anteriores. Para mí ser alcalde no es un trabajo, es un compromiso con la comunidad que me ha tocado vivir . Lo llevo de la manera más responsable posible, me guste más o menos, no estamos hablando de sentimientos, sino de compromisos y tengo que cumplirlo dando lo mejor que uno tiene a la sociedad. 

También es verdad que en las últimas elecciones había compañeros con mucha experiencia que se salían, y si se salían más con experiencia, la población podía percibir que en el equipo de gobierno falta de experiencia, aunque los otros grupos tampoco es que tuvieran mucha. Pero teníamos claro que, si nos tocaba gobernar, era con absoluta seriedad. Por tanto, se valoró la posibilidad de que algunos se fueran y otros debían quedarse, no se puede hacer el cambio tan bruscamente. Se estableció una estrategia y pasaba porque yo me volviera a presentar. Si se hubiera dado la fórmula de que otro me sucediera, me hubiera ido sin ningún problema. En el cargo que ostento, son más las responsabilidades y dolores de cabeza que el que puedo tener, en el instituto, que además es una profesión que me encanta. 

-De hecho, hay gente piensa que podía vivir muy bien en el instituto, con sueldo mucho mayor y más vacaciones…

Un sueldo mucho mayor, como 400 o 500 euros más de lo que voy a ganar menos en la Diputación.

-¿Incluso si entra como representante en algunos de los organismo de la Diputación?

Sé por dónde vas. El que dice eso es que piensa que el ladrón es de su misma condición y ese es el problema de este país. A mí me han dicho que soy tonto, no solo por entrar en la Diputación sino desde hace tiempo. Dicen, tú pudiendo ponerte el sueldo que quieras y te pones el mismo que el de profesor, como pasó en 2017. Si yo vengo a hacer lo mismo que otros que tanto dañan y manchan la política pues me quedo en mi instituto que estoy muy contento. Vengo para demostrar que la política desde la honradez se puede llevar a cabo. Me ha tocado hacerlo desde un ayuntamiento pero desde un Parlamento o Congreso Diputados se puede hacer de la misma manera.

-Es tan poco habitual que un político esté dispuesto a perder dinero por un compromiso que cuesta trabajo creerlo.

Pues la sociedad debería exigirlo a todos los políticos, nos iría mejor. Cuando yo veo que hay corruptos que se presentan a las elecciones y vuelven a ser elegidos, el problema lo tiene la población. Aprovecharse de la administración no es que esté bien vista, pero me da la sensación que se justifica demasiado.

 -O se acepta porque hemos llegado a verlo como algo normal, aunque no debiera ser así…

Para nada. Esto debe entenderse como un sacrificio. Vienes aquí porque tienes unas ideas, crees que son buenas, peleas para convencer a la población y finalmente la llevas a cabo. Eso tiene que hacerse con sacrificio, porque si al final acabas aceptando las prebendas… A mi me pagan el kilometraje porque yo pongo mi coche, en 12 años lo he utilizado para ir a temas políticos, y tiene 240.000 kilómetros, un 80 por ciento es para estas cuestiones. No me pagan dietas ni nada, solo el kilometraje. Las dietas a donde quiera que voy las rechazo.

Sería ideal comprar un coche para que los concejales se movieran en él para sus tareas políticas, pero mientras no pueda ser, cogemos el nuestro y nos pagan kilometraje. He formado parte del Consorcio Provincial del Agua, todo eso lo he rechazado, sólo he pedido que me paguen lo que me supone de gasto personal, es decir, el kilometraje.

Cobro el 75 por ciento de lo que cobra un diputado provincial más los trienios pero no los sesenios, esos los pierdos. La Ley de Administración General dice que cualquier cargo público que provenga de la Administración, que sea funcionario y tenga trienios, se les debe de respetar pero hay algunas áreas administración, como Consejería de Educación, que también aprueba sexenios. Tengo cuatro y el cuarto son más de cien euros más al mes que no cobro.

-¿Por eso le dicen que es tonto?

 Sí, pero si no lo hago así no me presento. Porque si vengo a aprovecharme, dejo de ser tonto pero empiezo a ser igual que otras personas.

-Muchas personas alaban su gestión, principalmente económica, algo que se ha visto plasmado en las urnas, pero otras señalan que se ha volcado en algunas áreas, como en la construcción de parques, abandonado otras, como por ejemplo no se pelea porque empresas vengan a instalarse en Arahal, un lugar con situación privilegiada. No puede buscar una fórmula el Ayuntamiento para convertir el pueblo en una zona atractiva, porque siempre no se va a estar dando un mes de trabajo para suplir las necesidades de trabajo.

Se ha tenido en cuenta y a todas las empresas que han venido hasta ahora, que han sido bien pocas, se les ha dado las facilidades. Si la empresa dispone de un terreno y tiene que ser objeto de actuación, mostramos toda la facilidad del mundo. Pero es verdad que las empresas que buscan un lugar donde alojarse se encuentran con que los propietarios piden por el suelo cantidades elevadas, porque tenemos tierra muy rica. Ahí no podemos hacer nada, empiezo a actuar cuando se ha encontrado un terreno.

-Y el suelo industrial que hay de sobra.

Hay suelo industrial, pero ocurre lo mismo, son privados que les interesa o no vender. Solo puedo agilizar todos los procedimientos administrativos y urbanísticos para que esa empresa pueda construir.  El caso claro es de las placas fotovoltaicas, cuando nos dijo el número de hectáreas coincidía con una finca municipal que tenemos cerca de la base. 

-Pero esta empresa va a crear pocos puestos de trabajo.

Pero es un ejemplo de que no ponemos trabas. Es verdad que el urbanismo en Arahal siempre ha sido muy complicado por no tener un PGOU adecuado a la realidad. Y reconozco que tenemos que darle una vuelta para que el mercado de trabajo privado venga, el reparto municipal de trabajo no es una opción de vida. Sin embargo, según los índices de empleo de la provincia, somos de los pueblos menores de 20.000 habitantes en el que menos desempleo hay. Es, por tanto, un municipio muy activo, entre los autónomos, trabajo que da el ayuntamiento y el campo, se consigue que haya menor desempleo que en el resto de la provincia.

-Y hay pocas empresas, para lo bien situado que está, peor está situado Osuna y, sin embargo, cada poco anuncian que se instala una empresa.. Las que hay ahora son casi las que había hace 30 años.

Hay una parte de culpa municipal porque el urbanismo ha sido muy enrevesado.

– ¿Sigue siéndolo?

Intentamos que cada vez lo sea menos y cuando aprobemos el PGOU, lo facilitará todo muchísimo más. Tenemos unas normas del año 1994 que nacieron muertas, porque esas normas no se adaptaron a lo que el pueblo necesitaba. El Urbanismo ha sido muy complejo. Una vez se apruebe definitivamente el PGOU, habrá que hablar con los promotores para que desarrollen suelo. Pero dependerá de la economía.

 

CONTINUA AQUÍ

Periodista. Directora y editora de aionsur.com desde 2012. Corresponsal Campiña y Sierra Sur de ABC y responsable de textos de pitagorasfotos.com

Lo Más Leído Hoy