Miriam Gómez, una ex del Ohmio que desafió al Estrecho para cumplir su sueño y el de muchos otros

Este sábado se cumple un mes desde que se lanzara junto a tres compañeras más a cruzar las aguas que separan España del continente africano. Más de 5 horas nadando entre delfines, con el viento y la temperatura del agua en contra, para cumplir un sueño personal y un reto solidario que persigue recaudar fondos para la construcción de una escuela en la India junto a la Fundación Vicente Ferrer y para una ‘Caravana de Alimentos’ destinada al pueblo saharaui.

Hablamos con ella sobre su experiencia y sobre su etapa en el club Ohmio de Arahal.

A. SOLANO

Las cuatro nadadoras que cruzaron el Estrecho. Miriam a la derecha. Foto enviada por Miriam.

El mundo del deporte deja, a veces, deja relatos y sucesos únicos y casi increíbles dignos de entrar en su historia. Uno de ellos puede ser perfectamente el de María Pujol, Fátima Souissi, María Principal y la sevillana y ex atleta del Ohmio de Arahal Miriam Gómez Gómez.

La sevillana es una auténtica amante del deporte. Lo practica desde los 12 añitos y desde entonces es su forma de entender el mundo y la herramienta que le ha permitido conocer lugares y personas maravillosas, como ocurrió en su etapa en el club arahalense. Es enfermera  en la Unidad de Gestión Clínica de Cirugía General del Hospital Universitario Virgen del Rocío (en la 3ª norte del Hospital General, trasplante de hígado) y es madre de una niña. Aún así, intenta sacar tiempo para practicar todos los días algo de deporte.

Le encanta las pruebas de fondo y por eso, después de plantearlo durante un tiempo, ella junto a sus tres compañeras se lanzaron desde Tarifa al Estrecho para ser las primeras en conseguir cruzarlo a nado juntas. Y  así lo hicieron. Durante más de 5 horas dieron brazadas y brazadas hasta llegar a Punta Cires, en Marruecos, algo que la sevillana “creía que no iba a hacer nunca” aunque confiesa se le pasaron volando”.

Miriam en un progra de TV de Canal Sur.

Muy buenas Miriam, casi se va a cumplir un mes de la hazaña del Estrecho de Gibraltar. ¿Qué tal estas?

Ya medio concienciada de que lo hemos logrado. Sumar un sueño personal con un reto solidario da alas…y brazadas extras.

¿Cómo recuerdas esa experiencia?

Echando la vista atrás, sólo recuerdo que creí que nunca tocaría la dichosa roca, y al mismo tiempo que se me pasó volando. Si tengo muy presente el regreso en el barco y lo mareada que iba (los vómitos parecían no tener fin).

¿Con qué te quedas de este reto?

Me quedo con el sonido agudo con el que se comunicaban los delfines…los azules del mar…el querer llegar y al mismo tiempo seguir disfrutando de cada brazada, que se repitiera un sinfín de veces más.

Ya cruzar el Estrecho es un reto importantísimo de por sí, pero si se hace en noviembre con el frío aún más ¿no? ¿Qué fue lo más duro o difícil?

Lo más difícil para mí fue saber llevar la constante sensación de nausea, sumado a la corriente en contra que tuvimos en más de una ocasión (a veces de 3 nudos). Es como un muro y parece que no avanzas.

¿De dónde surge la idea de que 4 mujeres se lancen a la mar para atravesar el Estrecho?

En un clinic de natación en Aguas Abiertas hace cerca de un año, nos juntamos Rafael Carmona (lleva la Fundación Vicente Ferrer en Andalucía y Extremadura), María Pujol y yo. Rafa lo había hecho en 2013 con los chicos de la asociación cordobesa Rumbo Solidario Entonces yo comenté que nunca lo habían hecho cuatro mujeres juntas. Y así de esa manera se encendió la mecha.

¿Cómo fue la preparación para ello?

Mi preparación ha estado supeditada a mi trabajo de enfermera y a mi condició como madre de Paulina (de 3 añitos). He nadado menos metros de los que hubiera querido, pero como decimos las “mamisguerreras”: Todo suma. Con las otras chicas he coincidido en competiciones y unas semanas antes nadamos en Sotogrande guiados por uno de los capitanes de la embarcación.

Fueron más de cinco horas que merecieron la pena por la causa social para la que se hacía ¿no?

20 kilometros en 5h25’ no está nada mal. Yo creo en el poder de las palabras y prefiero decir que merece siempre la alegría poder cumplir uno de tus sueños y poder al mismo tiempo hacer realidad el de muchos más, aunque no los conozcas.

La sevillana en su reto.

Miriam, también conocida por Miriam “Pirish” (apodo que le pusieron los Achuar cuando estuvo de voluntaria en Ecuador en 2008), ya tenía experiencia en pruebas de larga distancia. En 2012 ganó la travesía de La Bocaina, donde tuvo nadó los 15 kilómetros que unen las islas de Lanzarote y Fuerteventura en menos de 4 horas. Y tras su experiencia en El Estrecho ya piensa en un nuevo reto para la próxima temporada en la que cumplirá los 40 años. “La semana pasada me inscribí al Ironman de Lanzarote. Entro en los 40 y hay que celebrarlo, jaja”.

Hoy día, Miriam se considera nadadora de aguas abiertas y triatleta de larga distancia (fue 10ª del ránking nacional de triatlón, entre otros logros). No obstante, confiesa que intenta completar el Circuito Provincial de Campo a Través cada temporada, “algo de lo que tiene la culpa ser del Ohmio”.

¿Cuándo pasas a formar parte del Club Ohmio de Arahal?

Me inicié en el atletismo en 1988, con la friolera de 12 añito. Era marchadora con mi gran amiga María Luisa y también corría el circuito de Campo a Través. Hasta hice jabalina. Estuve en sus filas 5 o 6 años. El gran José María Gamboa se acordará.  Siempre he sentido como mi familia a los del Ohmio.

¿Cómo llegaste hasta la entidad arahalense?

Buena pregunta. No lo recuerdo, seguramente mi entrenador me lo recomendaría.

¿Por qué te desligaste de él?

Tampoco me acuerdo, seguramente el Chapín Jerez de entonces, en primera división, me ficharía.

A pesar de que no formas parte ya de él, aún mantienes contactos con la gente del club, ¿no?

Sí claro, en cada carrera que me los encuentro. Nos damos abrazos y besos a mansalva.

¿Cómo recuerdas tu etapa en el Club arahalense?

Con mucho cariño, admiración por cada uno de sus componentes…todos son grandes personas. Maravillosos.

No sé si puedes estar al corriente de los movimientos de tu ex equipo, que actualmente está creciendo cada día más con una cantera importante ya y con corredores que destacan en casi todas las carreras en las que participan, como por ejemplo Jesús Brenes “Mota” o Carmen Valle en mujeres. ¿Qué opinión tienes de este club y de la labor que están realizando personas como Rafa García ahora al frente de los más pequeños?

Carmen y yo hemos sido compañeras de pequeñas. Es una campeona siempre. Rafa es el marido de María Luisa, una de mis mejores amigas. Cuidar la cantera como lo hace él, es lo que hace grande a un equipo y el  OHMIO lo es.

Miriam, a pesar de los años, guarda también muchas anécdotas y momentos vividos con la entidad de Arahal. “La garbanzada de Carrión, los viajes en autobús, las comidas en la nave del equipo, las fotos que tendrá guardadas José María… La emoción me desborda”. Por todo ello, la trialtela sevillana considera que sus ex compañeros son unos “afortunados por pertenecer a uno de los mejores clubes andaluces y españoles”. La sevillana lo tiene claro: “gran parte de mi tesón, de la constancia, de mi sonrisa y de mi diversión hoy día con el deporte, 30 años después, se lo debo a José María y a la compañía de Arahal”.