Los cazadores toman la palabra

Los cazadores toman la palabra para decir que ellos, sus familias, los empresarios que viven de esta actividad, los que trabajan en su mantenimiento o quienes se benefician indirectamente de ella, también votan. 

Los cazadores andaluces han comenzado a “levantar” la voz. Están convencidos de que si siguen sin defender esta actividad deportiva, los políticos decidirán prohibir la caza sin tener en cuenta, por ejemplo, su aportación al Producto Interior Bruto (PIB), su arraigo en las zonas rurales y el trabajo que realizan para el mantenimiento y cuidado del medio ambiente, entre otras cuestiones. Por eso, desde las elecciones autonómicas han puesto en marcha una campaña, #LaCazaTambiénVota con el objetivo de que todos los partidos políticos escuchen sus reivindicaciones, conozcan su actividad y aclaren sus posturas antes de las citas electorales.

Las cifras que manejan dicen que justifica su pelea. El 87% del territorio español tiene gestión cinegética, lo que supone 43 millones de hectáreas, divididos en 32.363 cotos. Concretamente Andalucía es la segunda región española, después de Castilla y León, con 7.038.741 hectáreas de terrenos cinegéticos. Esta actividad supone un gasto anual de 6.475 millones de euros y la creación de 187.000 puestos de trabajo. El gasto directo supera los 5.470 millones de euros, lo que representa el 0,3% del PIB.

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En total, alrededor de 180.000 andaluces (exactamente 179.180 licencias), de todos los estratos sociales, practican esta actividad y hay 1.204 sociedades federadas. Datos recogidos en un estudio de Evaluación del Impacto Económico y Social de la Caza en Castilla la Mancha (realizado en 2016) por Deloitte España (expertos en auditorías) y la Fundación Artemisan y registrados por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía.

272 mociones presentadas en ayuntamientos andaluces

Hasta el momento, las sociedades de cazadores repartidas por todo Andalucía, han presentado 272 mociones para su aprobación en pleno, 258 están en trámites y 4 aprobadas a su favor, según datos recogidos por la Federación Andaluza de Caza. En ellas reclaman que se tengan en cuenta estos datos económicos pero también su aportación a la biodiversidad y ecosistemas favoreciendo el control poblacional de especies que provocan daños en la masa forestal y en la agricultura. O la vigilancia directa ante la propagación de enfermedades.

De hecho, en la mixomatosis (enfermedad que ha acabado este año con una buena parte de la población de las liebres), las denuncias de los cazadores han sido vitales para detectar qué zonas estaban afectadas y para controlar su propagación, retirando incluso liebres muertas del campo y rescatándolas para curarlas.

Y en esta campaña se está dando la paradoja de que en algunos de los ayuntamientos en los que se han registrado las mociones, sus gobernantes son de formaciones de izquierda, incluidas en la marca Adelante Andalucía, coalición por medio de la que se han presentado a las pasadas elecciones autonómicas. Entre estas formaciones está Podemos, único partido que no aceptó sentarse con la Federación Andaluza de Caza antes de esta cita electoral por ir en contra de la actividad.

El alcalde de La Roda de Andalucía, Fidel Romero, se ha comprometido con los cazadores para que la moción salga adelante.

Formaciones de izquierdas que han mostrado su apoyo

Es el caso de La Roda de Andalucía, cuyo alcalde, Fidel Romero, declaró a AIONSur que “es indiscutible su importancia en el mundo rural y la repercusión económica y social que tiene la caza en este punto de la provincia”. Fue en la V edición de la Feria de la Caza y Perdiz de La Roda de Andalucía, celebrada a mediados del pasado mes de enero, en la que se registró más de 10.000 visitas. Romero, además, se reunió en el salón de plenos con los representantes de la Federación para apoyar públicamente la moción presentada.

También el alcalde de Los Palacios y Villafranca, Juan Manuel Valle (IU) ha mostrado su apoyo al colectivo de cazadores declarando que “hay pueblos y zonas que si no fuera por la caza, no habría apego al territorio y estarían desmanteladas”. Estas declaraciones las ha recogido Canal RTV de Los Palacios en un encuentro con distintas asociaciones de cazadores el pasado 8 de febrero. Para el primer edil palaciego se trata de una actividad “legal que forma parte de la cultura de Andalucía y de España» resaltando su “gran” repercusión económica.

Ya en Málaga, la alcaldesa de Villanueva de Tapia, también de la misma formación de izquierdas, se ha pronunciado a favor de la caza, explicando en la revista Jara y Sedal, que “cazadores locos hay en todos lados, como hay abogados locos y arquitectos, pero la mayoría son cuidadores del campo y muy respetuosos con él”.

Actividad cinegética con arraigo en los pueblos

La Federación Andaluza de Caza empezó a moverse en el ámbito político antes de las elecciones andaluzas algo que no habían hecho hasta ese momento. “Las decisiones las toman los políticos y los animalistas ya habían dado un paso adelante por lo que la Federación decidió actuar”, explica Fernando Gutiérrez, cetrero, licenciado en Ciencias Ambientales y técnico en Sevilla de la Federación Andaluza de Caza. Así fue como pidieron reuniones con todos los grupos y como todos los recibieron, excepto Podemos.

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Desde entonces, utilizando la estructura de sociedad de caza federadas, presentan mociones en los plenos para que los partidos políticos que gobiernan en ciudades y pueblos tengan en cuenta el papel social de la caza “sobre todo es una actividad que se desarrolla en los pueblos, con un arraigo importante, llevada a cabo por gente humilde y con una influencia importante en el empleo de estas zonas”.

Para ellos, el posicionamiento de Podemos sólo obedece al perfil de sus votantes por lo que en su propaganda electoral atacan la caza. Y se trata de una actividad que “nunca ha sido tema electoral porque no era una prioridad, estaba antes la educación o la sanidad”, dice este técnico. Pero en los últimos meses “los cazadores se han sentido amenazados porque se habla continuamente de prohibición”.

«Lo menos importante es matar»

Por eso la moción presentada recuerda a los políticos que los 180.000 cazadores, familias y empresarios que viven de esta actividad o están se benefician de ella, como los agricultores, “también votan”.

Fernando Gutiérrez asegura que en la caza “lo menos importante es matar”. Y lo explica diciendo que “los animalistas, en el mejor de los casos, son ignorantes y muy cínicos” porque la especie que amenaza la biodiversidad es la humana. “Por encender una luz mueren electrocutadas miles de aves en el tendido eléctrico. Son personas desvinculadas del mundo rural”. Y pone su experiencia personal de ejemplo. Él es cetrero, caza con halcón peregrino “cazar una perdiz me sale mucho más cara que ir a comprar pollo, pero se la doy a mi hijo porque es una carne con menos grasa y más nutritiva, además cuando voy de caza disfruto de la naturaleza”.

En la moción también se pide apoyo de los gobernantes para proteger el silvestrismo (15.000 practicantes en Andalucía), actividad que consiste en capturar con vida, “y sin daño alguno”, a ejemplares de las especies de jilguero, pardillo y verderón para adiestrarlos en el canto. Actualmente la Unión Europea pone en duda su legalidad.

Las cifras cambian a diario, uno de los últimos ayuntamientos que la ha aprobado es el de Córdoba, ellos esperan que antes de las elecciones municipales este apoyo sea general porque, a su entender, están defendiendo una actividad que los une a la naturaleza, razón por la que son los más interesados en cuidarla.