La Semana Santa puede más que un voto

La Semana Santa puede más que un voto. Y se está viendo día a día, porque la convocatoria de elecciones generales para el 28 de abril ha hecho que los partidos políticos tengan que poner en una balanza la devoción o el voto.

Ya son varios partidos políticos y/o ayuntamientos que han anunciado que no habrá campaña electoral en sus pueblos durante la Semana Santa, aunque en algunos casos el asunto tiene sus matices.

Sólo durante el recorrido

En Marchena, PSOE y PP han anunciado oficialmente que no harán campaña en esos días, aunque se ciñe el asunto a las calles por donde pasarán los pasos de Semana Santa, que, al final, coincide con las demás propuestas.

Es lo mismo que se ha anunciado en Arahal o en otros pueblos de la provincia, con el mensaje subliminal de «respetar la devoción».

Pero todo sale tras el cálculo fácil de que ver pasar un Nazareno delante de un cartel electoral pidiendo el voto puede cabrear, y mucho, al cofrade indeciso.

Que haya un cartel de un candidato pidiendo el voto a un vecino de la periferia mientras se come una torrija el Miércoles Santo parece no tener importancia, pero que pase delante de la cara de una Virgen ya es otra cosa.

De hecho, el otro matiz de este asunto es que se trata de elecciones generales, no municipales, con lo que los partidos locales no tienen reparo en perder calles para su promoción.

Y es que sabe que tampoco les va a provocar un gran quebranto en sus pueblos que su candidato nacional pierda algún voto.

El rizo lo ha rizado Podemos de Utrera. Mientras algunos de los miembros de este partido se manifiestan claramente anti Semana Sana, han hecho mano de liturgia electoral para unirse a esta idea.

No pondrá publicidad electoral en el recorrido de las procesiones «para colaborar, como siempre, para que la Semana Santa luzca lo más bella posible».

La portavoz de Podemos Utrera, Ana Casado, ha expresado que no se colocará ningún tipo de propaganda electoral por las vías de las procesiones ni se realizará ningún acto electoral durante esas jornadas.

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Casado, como sus compañeros, ha calculado perfectamente que el impacto de un mitin electoral un Martes Santo no tendría mayor repercusión que una charla en el salón de su casa, así que ha elaborado una nota que resume sus repentinas creencias cofrades.

En ella, cita que «el partido remitirá un escrito tanto al Consejo Local de Hermandades y Cofradías como a todas las hermandades de Utrera informando de su compromiso con la semana grande de la pasión en nuestra localidad».

Obviamente, «no vamos a hacer campaña coincidiendo con las procesiones más señaladas porque la Semana Santa tiene muchos aficionados que no quieren perdérselas, incluidos, como no, personas de Podemos».

La celebración de las elecciones generales el 28 de abril provocará que parte de la campaña electoral se desarrolle durante la próxima Semana Santa, y, si de paso, se gana algún voto enfundándose un capirote electoral, parece que mejor que mejor.