La finca El Alabardero vuelve a estar operativa con la plantación de espárragos y viñas

Un proyecto que incluye dos cultivos sociales y la formación de una empresa cooperativa para explotarlo

Jóvenes del Programa Empleo Joven plantando espárragos. Fotos: A.I.

C. GONZÁLEZ @verbigracia_6

La finca municipal El Alabardero se pone en marcha. Esta semana se han plantado 6,2 hectáreas de espárragos, uno de los dos cultivos sociales que se producirán en estas tierras. Los jóvenes contratados por el programa Emplea Joven y el alumnado de la Escuela Taller Ecolivar, dirigidos por el área municipal de Desarrollo, preparan el proyecto y pelean por quitarle el San Benito que su historia tiene desde que es propiedad municipal.

“Esto debe ser Andalucía, un proyecto que parte de los jóvenes, la administración sólo les da un empujoncito”, dice el concejal de Urbanismo y Desarrollo del Ayuntamiento de Arahal, José A. Cabrera. a pie de campo, mientras trabaja en el reparto de las plantas de espárragos que se han distribuido por una parte de la finca.

Junto a los espárragos hay otras 4 hectáreas preparadas para plantar viñas, un total de 250 plantas. Han sido los trabajadores contratados a través de Empleo Joven el que ha realizado desde noviembre todos los trabajos de limpieza y preparación de las seis hectáreas de terreno.

Cristian Gómez, ingeniero agrónomo, es el encargado de la finca y de dirigir estos trabajos. Explica a esta web que las labores de limpieza de la tierra para poder plantar han sido minuciosas porque el lugar se había convertido en un estercolero donde tiraban sobre todo escombros y basura.

Foto: A.I.

En este proyecto de empleo han participado hasta un total de 37 jóvenes menores de 30 años que han quitado la basura, pasado el cultivador y vuelta a quitar la basura, palmo a palmo del terreno para regenerar la tierra, la han surcado, han pasado el rotavator (para que la tierra quede mullida); han limpiado la balsa y el pozo que está dentro de la finca, han vallado toda la zona, reconstruido pequeños puentes de entrada para cuando tengan que entrar grandes vehículos a cargar los productos. En definitiva, han preparado las instalaciones para hacerlas productivas.

Los jóvenes esta semana han empezado a plantar espárragos, un cultivo social que necesitará la primera temporada para hacer la planta madre, es decir que hasta el año que viene no se cogerá la primera cosecha. Con un tractor y un mecanismo que ellos mismos han construido van instalando las gomas para el riego, enterradas en los surcos. Según cuenta Cristian Gómez, esta instalación evitará que en verano surjan las malas hierbas porque los productos que aquí se van a cosechar son ecológicos.

Una certificadora de la Junta de Andalucía ha visitado la finca en varias ocasiones para establecer los parámetros de forma que finalmente se certifique que se trata de productos cien por cien ecológicos. De hecho, esta finca será pionera en la producción de uva de mesa ecológica.

El 30 de abril termina el programa de Empleo Joven. Pero el alumnado de la Escuela Taller con el que se compaginan en este proyecto se quedará para mantener las tierras hasta junio. A partir de este mes, el proyecto incluye la creación de una cooperativa entre los encargados y los técnicos especializados que han dirigido a estos jóvenes, como Juan Antonio Revidiego y Paco Macho.

Terrenos dedicados a la plantación de vides en el próximo mes. Fotos: A.I.

El alumnado de Ecolivar, Escuela Taller, trabaja también en estas tierras en la construcción de un invernadero y un huerto ecológico. Ellos precisamente son los que hacen pruebas con plantas que sean resistente a plagas, como ejemplo el nematodos o gusano redondo, un parásito que puede acabar con cualquier especie hortícola. Precisamente se ha plantado pepinos que es la más sensible a este animal.

Una vez acaben su contrato, harán una selección de los trabajadores que han participado en este proyecto para acceder gratuitamente a un curso sobre espárragos y viñas como cultivo ecológico que impartirá el IFAPA de forma gratuita.

Los meses pasan y el cambio se va viendo ya en la finca El Alabardero. Las ilusiones se plasman en un proyecto que sacan adelante los jóvenes a través de un programa puesto en marcha por las distintas administraciones, especialmente la municipal.

Es una apuesta por el empleo agrícola, por la sostenibilidad, según cuenta José Antonio Cabrera, concejal de Desarrollo que ha seguido el proyecto desde primera hora.

Y una apuesta por quitar el San Benito de negatividad que acompaña el nombre de esta finca cuando era gestionada hace 20 años por otro gobierno municipal.