Connect with us

Sin categoría

La Base aérea de Morón cumple 75 años con un acercamiento a los pueblos que la rodean

El teniente coronel Ortuño explicando el funcionamiento del traje de los pilotos del Eurofigther. Foto: A.I.

A. SOLANO/C. GONZÁLEZ

Las autoridades militares de la Base Aérea de Morón de la Frontera, en término municipal de Arahal, han decidido abrir al público las instalaciones, de una manera u otra para celebrar su 75 Aniversario. El 31 de mayo tienen previsto organizar una jornada de puertas abiertas y, mientras, van a llevar fotografías, maquetas, documentales y darán conferencias sobre la historia de las instalaciones aéreas por las cuatro localidades circundantes, como Arahal, Utrera, El Coronil y Utrera. Pero esta celebración ha comenzado el jueves día 5 con una visita guiada para los medios de comunicación locales.

Ha sido el teniente coronel Miguel Ángel Ortuño quién ha acompañado y explicado a los medios la situación actual de la Base Aérea de Morón, respondiendo incluso a las preguntas comprometidas. “Les aseguramos que no hay peligro ninguno para las poblaciones del entorno –dijo- aquí no hay ningún tipo de armamento que pueda suponer peligro”. Aunque, aseguró, está claro que el riesgo 0 no existe.

Foto: A.I.

En referencia a otro tema que ha sido actualidad acerca de si el ejército norteamericano utilizaba las instalaciones para pasar la cuarentena después de venir de África donde podían entrar en contacto con el ébola, el teniente coronel dijo que no era cierto, los soldados que venían de esa zona pasaban la cuarentena en “otro lugar” y además en zona de riesgos toman las debida precauciones para evitar el contagio. “Sobre todo porque en los estadios primeros, la enfermedad no es contagiosa, lo es al final, por eso la enfermera de Madrid no se la contagió a nadie de su familia con la que estuvo antes de saber que estaba afectada”.

Pero la actividad principal se centró en dar a los medios locales una explicación exhaustiva de la misión principal de la Base aérea acompañada de una visita por las áreas más significativas. La visita comenzó por el Ala 11 donde se encuentra los simuladores de los Eurofighter. El teniente coronel Ortuño explicó a los periodistas el programa de actividades entre las que se encuentra una jornadas abierta al público para el 31 de mayo, día previsto para la exhibición acrobática. El resto de actividades se centrarán en los pueblos circundantes.

Ala 11 operatividad del Eurofighter

La Base Aérea de Morón se comenzó a construir en 1940, entonces se llamaba Aeródromo Militar “Vázquez Sagastizabal”. Desde entonces, las instalaciones aéreas han ido evolucionando a golpe de entrada en funcionamiento de distintos alas y grupos de trabajo o por  la llegada de diversos modelos de aviones. Primero fueron las aeronaves Heinkel 111 que en 1959 se sustituyen por los F-86 y en 1970 por los F-5 o en 1995 por los F-18. No obstante, ya mucho más cerca en el tiempo, son los Eurofigther los que se convierten en la estrella de la aviación a partir del 2004. Estos aviones y la preparación de sus pilotos centran la actividad del Ala 11.

Los EF-2000 Eurofigther o avión C-16 se fabrican en Getafe y son el resultado de un proyecto multinacional en el que, junto a Italia, Alemania y  Reino Unido, participa España en un 14 por ciento. El Ejército del Aire ha recibido 40 aviones de un total de 73 fabricados. A la base de Morón llegan tres el 27 de mayo de 2004 y se crea el 113 Escuadrón, Unidad de Conversión Operativa para todos los pilotos de caza, aunque actualmente en el ala 11 hay 25 aviones que han realizado 24.200 horas de vuelo.


La formación de los pilotes dura al menos seis meses e incluye su paso por 3 simuladores situado en el Ala 11. En ellos estos profesionales se someten a pruebas similares a la realidad. Incluso, explicaba el teniente coronel Ortuño, las imágenes que ven cuando están pilotando en el simulador, es una copia exacta de lo que van a ver en los lugares donde harán las misiones. “De esta manera su cerebro guarda estas impresiones y cuando se monta en un avión no nota el cambio”, explica el militar. Miguel Ángel Ortuño es uno de los seis militares de su misma graduación que aún vuelan en España, el lunes próximo tiene que hacerlo.

Se trata de profesionales con un alto grado de formación y preparación física y mental que se someten a situaciones de alto riesgo. Llevan un traje especial que ayuda a controlar las fuerzas g sobre el cuerpo, una unidad de medida que toma como referencia la fuerza generada por la gravedad en la superficie terrestre. Así, un cuerpo estático estaría sometido a una fuerza g en dirección vertical (debida únicamente a la gravedad), mientras que si el objeto se encuentra acelerando o girando presenta una mayor magnitud en fuerzas g debido a estas aceleraciones, situación a la que se someten los pilotos. Con la preparación pueden aguantar de 7 a 8 g antes de perder el conocimiento.

Otro modelo de avión

El recorrido de los medios de comunicación por las instalaciones militares incluyó una visita a los talleres o grupo de apoyo en los que se reparan los Eurofigther. El teniente coronel Ortuño explicó que desde que se pusieron en funcionamiento, estos aviones han sufrido cambios debido principalmente al software que incluye sus sistemas informáticos de funcionamiento. Se trata de aviones con 16 metros de longitud, 11 de envergadura y 5,3 de altura, con un peso vacío de 11.500 kilos y el máximo que soporta es de 21.800 kilos. Su autonomía de vuelo, sin depósitos auxiliares, es de 90 minutos  y el techo máximo que alcanza en vuelo es de 50.000 pies. La carga que puede llevar es de hasta 10 misiles aire-aire. Para mantener en condiciones la flota hay personal militar y civil, ingenieros especialistas en su diseño y mecánica.

No obstante, la base aérea alberga también al Grupo 22 de Patrulla Marítima operativo en estas instalaciones desde 1973 y ahora formado por 74 personas, entre ellas el capitán Moreno quién fue el responsable de explicar su funcionamiento a los medios de comunicación. Actualmente la flota está compuesta por 1 avión P.3 del modelo Alfa, 1 del modelo Bravo y 3 aviones del antiguo modelo Bravo modernizados a “Mike” que llegaron en 2007. Esta modernización ha mejorado notablemente sus capacidades e incrementado el amplio espectro de misiones en las que ha participado.

Avión P.3- Foto: A.I.

Los aviones P.3 tienen capacidad para realizar distintas misiones como lucha antisubmarina y antisuperficie, vigilancia marítima, minado, vigilancia de narcotráfico e inmigración ilegal, búsqueda y salvamento, mando y control aéreo, inteligencia electrónica y fotográfica, relé de comunicaciones, entre otras. Uno de esta unidades pesa 9 toneladas vacío, y lleno puede triplicar dicho peso, además tiene una gran autonomía de vuelo (10 horas), pudiendo mantenerse en caso de emergencia con sólo dos motores de los cuatro que lleva.

La tripulación normal de este avión está compuesta por 13 personas, nada que ver con el Eurofigther. Un equipo procedente de dos ejércitos, el del Aire y la Armada que se coordinan para cumplir con la misión asignada. Hasta ahora llevan más de 69.000 horas de vuelo y han participado en numerosos ejercicios multinacional y en misiones de mantenimiento de la paz, dentro del ámbito de la OTAN y UE auspiciados por la ONU. Algunas de las más importantes son Yibuti (2002-2004), Operación “Libertad duradera” en lucha contra el terrorismo internacional en la que la Unidad mantuvo desplegados un avión P.3 y 44 personas que realizaron 240 misiones sobre espacios marítimos del Mar Rojo, Golfo de Adén, países del Cuerno de África y Océano Índico.

El Grupo 22 más recientemente ha participado en la Operación “Niebla centinela”, de lucha contra la inmigración ilegal que permitió detectar desde su puesta en marcha en mayo de 2006 a 134 embarcaciones y salvar la vida de más de 10.000 inmigrantes. También han estado en la Operación “Centinela Índico”, de carácter nacional, contra los actos de la piratería en aguas de Somalia. Y desde 2003 hasta la actualidad forma parte de la Operación Atalanta en el marco de una resolución de las Naciones Unidas, habiéndose realizado hasta la fecha más de 600 misiones y más de 4.700 horas de vuelo.


El P3 es un avión que permite realizar una labor rápida, autónoma y con gran capacidad de detección y seguimiento, por lo que es muy apreciado dentro del Ejército Español. El capitán Moreno resaltó que en la actualidad en la zona del Estrecho de Gibraltar se viven “una máxima tensión” a causa de la amenaza del terrorismo yihadista y la inmigración.

Zona norteamericana

A los militares norteamericanos no les gustan muchos las visitas. Por eso el aérea donde están ubicados dentro de la base no recibe a mucha gente y menos a periodistas comarcales. Es una pequeña ciudad donde tanto los militares como sus familias tienes de todo hasta colegios para sus hijos.

Están en la base desde otoño de 1953, en el contexto d la Guerra Fría y en virtud de los Pactos de Madrid. Fue entonces cuando firmaron el primer convenio con Franco en el poder. El Jefe de Estado creía que era un aliado necesario e inevitable, entonces proclamaba «nuevas formas de vida supranacional», a las que «ha de ajustarse la política exterior de las naciones y desterrar los conceptos viejos y los nacionalismos aldeanos».

La Fuerza Aérea de los Estados Unidos (en inglés: United States Air Force, abreviada como USAF) es la rama de las Fuerzas Armadas de este país que se encarga de la guerra aérea. Esta es la que tiene presencia en las instalaciones militares que celebran aniversario, además de los marines otra fuerza expedicionaria aquí destacada.

Según publica la web defensa.com, durante los años setenta, Morón fue designada como Base de Apoyo Primaria por Washington y su estructura e instalaciones se estabilizaron en unas 400 personas. En 1994, como consecuencia de las reducciones en Europa, el Pentágono recurrió de nuevo a Morón para que asumiera la responsabilidad de apoyar a todas las unidades de la USAF en España, Italia y Grecia.

En 2003, como consecuencia de la operación que culminó con el derrocamiento de Sadam Husein, más de 7.000 soldados pasaron por sus instalaciones, el tránsito más grande de militares desde la II Guerra Mundial. En 2006 llegó a gestionar un total de 966 vuelos y, en 1999, a raíz de la operación aérea sobre Kosovo, se convirtió de nuevo en la base de aviones cisternas más grande e importante del momento. Hasta 6.000 vuelos anuales asegura el Pentágono que pasan por territorio español.  En la actualidad, el gobierno norteamericano se sigue sirviendo de la base de Morón como apoyo logístico para todas las crisis que se viven en África y Oriente Medio. La última ha sido sanitaria, la del ébola.

La base aérea se abre de esta manera a la población circundante que en su gran mayoría no sabe la importancia de las operaciones que se realizan en las instalaciones militares vecinas pero desconocidas.

Publicidad
Click para comentar
Publicidad

Lo Más Leído Hoy