Inaugurada la Feria del Libro de La Rinconada que durará tres meses

El Centro Cultural de La Villa ha recibido a la escritora y periodista, Mercedes de Pablos, que este año ha sido la encargada de dar el pregón inaugural de la X edición de la Feria del Libro de La Rinconada y que ha contado con alumnado de los IES locales como público. Estación de las Letras vuelve a llenar de libros y firmas el municipio, en una estación, la de la primavera, que traerá hasta el mes de junio las principales novedades, pero también las más importantes distinciones literarias. Apoyo a la creación local y provincial, a las editoriales y con encuentros y actividades para el fomento de la lectura y la creación.

La delegada de Cultura, Raquel Vega, encargada de presentar a la autora, ha señalado que comienza “Estación de las Letras, un proyecto semilla para una primavera que quiere sembrar libros para abrir las mentes, si leemos creceremos en capacidades personales y profesionales”. Vega ha desgranado el programa de esta edición que contará “con alrededor de medio centenar de autores y en donde destaca el reconocimiento con el Premio Factoría Creativa de las Letras a Marta Robles, Carmen Posadas y Almudena Grandes, a título póstumo. Con Fernando Iwasaki, Eva Díaz, Salvador Gutiérrez Solís y De Pablos como mentores. También estarán en esta Feria Luz Gabás, Máximo Huerta, Cristina Campos, Luis García Montero, Inma Rubiales. Homenaje a Saramago de la mano de Pilar del Río, Juan Pinilla o la propia De Pablos. Con lugar destacado de la literatura andaluza emergente, el ciclo de novela negra, el Espacio Violeta o la poesía”.

Sobre Mercedes de Pablos ha destacado que es un referente cultural, periodístico, literario y feminista. “Humanista, culta, rotunda en la conversación, pero dialogante, con una sonrisa sempiterna”. Mercedes fue la primera mujer directora de una cadena de radio en España, ya que a las ondas radiofónicas ha dedicado la mayor parte de su trayectoria profesional en emisoras como la SER, RNE, Canal Sur y Andalucía Abierta Radio. Es Premio de Periodismo Ciudad de Córdoba (1990), Premio Andalucía de Periodismo (1992), Premio Meridiana (2001) y Mención honorífica del Premio Adriano Antinoo (2016). Ha colaborado en medios como Diario de Sevilla, Málaga Hoy, Europa Sur, El País, ElDiario.es, 7TV y la cadena SER.

La pregonera ha dado inicio a su discurso dirigiéndose al público joven para decir: “No hay nada más hermoso que seducir con las palabras, ni nada peor que aburrir con las palabras y espero que esto segundo no ocurra.

La escritora ha basado su pregón en tres palabras imprescindibles: “Érase una vez”. “Cerramos los ojos y decimos, Érase una vez y los palacios de malaquita de Rubén Darío, los velos de Sherezade o el botijo roto de El Lazarillo se nos cuelan en la cabeza como un pensamiento que sabe que viene a casa”.

Porque, para esta periodista “los lectores somos la casa de los libros”, y esos libros existen también en la boca, el origen de lo oral, en las nanas, en esos primeros cuentos que “nos abrieron las puertas de los sueños”. Julio Verne, Mika Waltari, Gabriel García Márquez, Miguel de Cervantes y Matilde de Irisarri “continuaron la nana, los érase una vez”.

La autora de ‘Ajuste de cuentos’ (2011) ha referido que esta Estación de las Letras es un “tren cargado de palabras… la palabra, el mayor y mejor invento que el hombre, la raza humana haya creado jamás”. Así, De Pablos ha mencionado: “Existo porque me nombras, dijo el poeta”. Palabras que salen de la boca “la puerta de aterrizaje de los pensamientos, la sala de embarque de los mejores viajes”. Son “el clic que abre la cueva de Aladino de las maravillas, el Abracadabra de la literatura”.

Para la periodista, “los buenos libros son trenes a los que nos subimos para emprender un viaje del que nunca volvemos siendo los mismos” y ha recordado que Carmen Martín Gaite llamó a la literatura “el cuento de nunca acabar”.

Esa literatura que permite soñar: “La capacidad de los seres humanos de trascenderse dice la filosofía. La capacidad de darle la vuelta al día en ochenta mundos, decía Julio Cortázar”.

Otro de los momentos del discurso ha sido cuando la escritora se ha preguntado si hay libros buenos o libros malos. “Hay libros que cambian la historia de la literatura… y libros que se olvidan… porque los lectores también somos libros, con días buenos, días sublimes, días históricos y días en los que la cabeza pide que las cosas sean fáciles, también olvidables”.

También ha hablado de novelas gráficas, del mundo del cómic y de los personajes, de aquellos que trascienden al escritor o de escritores convertidos en personajes. De finales y principios de libros únicos e inolvidables, como “En un lugar de la Mancha” de Cervantes, el inicio de ‘Cien años de Soledad’, el de ‘Historia de Las Dos Ciudades’ de Dickens. “Porque todo se puede contar… hasta la física cuántica tiene una manera hermosa de ser enganchada”, recordando a Martín Gaite de nuevo.

En un guiño al público joven, De Pablos ha enumerado a escritores y escritoras a los que el fútbol les quitaba el sueño, como Camus, Saramago, Quino, Eduardo Galeano, el Nobel Pete Handke o Julio Llamazares. También ha recordado las novelas juveniles, con la prolífica Enyd Blyton que “recoge de manera más comercial y chapucera, aunque eficaz, la gran tradición romántica de las hermanas Brönte, Jane Austin o Louisa May Alcott”.

Porque con los libros “podemos elegir quien ser. Qué peligrosas lecciones de los libros… nos hacen sentirnos mejores. Ser héroes, ser descubridores de asesinatos o asesinos”. También nos permiten ser invisibles para poder “colarnos en los salones de Ruan del brazo de Enma Bovary o al claustro de la catedral de Vetusta”.

Y en esa invisibilidad, ha querido recordar a las mujeres excluidas u ocultas en la literatura. “De todo el realismo español del siglo XX citamos a autores que sobrevivieron a la dictadura, Ramón J. Sender, Ignacio Aldecoa, Francisco Candel, pero olvidamos a Luisa Carnés, posiblemente la más sólida e inteligente pluma que retrató la vida de los trabajadores, de los excluidos, de los pobres”. Una autora que llegó a hacer crónicas de fútbol para el AS. También ha recordado a Josefina Carabias y a María Lejárraga, la autora de ‘El sombrero de tres picos’ que estaba oculta bajo el nombre de su marido.

En definitiva, porque leer, se puede leer “historia y ensayo y hasta economía o política. El cuento de nunca acabar. Podemos saberlo todo si nos lo explican bien”. Ha cerrado su discurso con un poema cómico de Ángel González y ha finalizado deseando que “nunca nos falten la luz de las palabras, escritas, dichas, susurradas, cantadas. Que nunca dejemos de contar”.