Medio Ambiente

El estado de diversos parques y plazas, motivo de quejas de muchos vecinos

Reclaman una mayor actuación y mantenimiento en esos espacios para el disfrute, especialmente, de los niños.

Plaza de la Fraternidad.

La situación de varias plazas y parques del municipio están levantando las quejas de los ciudadanos últimamente. Vecinos de diferentes zonas de la localidad protestan por estado el de abandono en el que se encuentran algunos de ellos.

Estos lamentan especialmente la suciedad que continuamente suele haber, así como la abundante vegetación existente en mucho de ellos, como, por ejemplo, hasta hace unos días la Plaza de los Inventores, situada justo por detrás del Colegio de Infantil de San Roque. En este caso, las hierbas llegaban casi a tapar las papeleras y banco para sentarse.

Situaciones parecidas ocurren en la zona verde de la calle Alameño, en la Trocha de la Victoria, o La Mineta.

Banco roto en la Plaza de la Fraternidad.

Otra zona donde continuamente se producen las quejas de los vecinos es la Plaza de la Fraternidad, en la zona de La Torbilla. Propietarios de viviendas contiguas a este lugar han mostrado a esta web en diferentes ocasiones sus quejas por la situación en la que suele encontrarse la explanada: suciedad, cristales, bancos rotos, ausencia de juegos infantiles y papeleras, superficie de tierra y polvo… Además, alegan que ya presentaron un escrito en el Ayuntamiento denunciando estos hechos, pero hasta al momento no ha servido de mucho.

En la misma línea, ciudadanos de la calle Picasso afirman haber presentado sus quejas en el Consistorio por la situación de abandono en la que está el parque de esa zona. “Tenemos escritos presentados desde 2008. También nos hemos reunido con el delegado de Medio Ambiente, pero no hemos obtenido respuesta alguna del responsable”, afirma uno de los propietarios.

En dicho parque tampoco existe ningún tipo de juego infantil y presenta baches y hundimientos. También hay hierbas de las que se quejan estos vecinos, al igual que de la existencia de insectos que producen numerosas picaduras de los niños que acuden allí a jugar. Manifiestan que ese lugar lleva muchos años así y, por eso, protestan por el tiempo transcurrido sin que se actúe en él.