El Rey comprueba, diez años después de su última visita, que la Base de Morón es puntera en España

Como Rey Felipe VI era la primera vez que visitaba la Base Aérea de Morón de la Frontera (Sevilla) y así lo han recordado los militares veteranos que ya fueron testigos en 2008 de su paso por este aeródromo. Fue aquí donde el entonces Príncipe Felipe de Asturias probó lo que hoy ha llamado «la maquina perfecta», el Eurofighter, un caza que recorre a diario los cielos de la comarca, con una operatividad de casi el 70 %, muy superior a otros países que cuenta con este mismo modelo de nave. Seis de estos aviones acaban de llegar con 1.000 horas de vuelo más de Lituania, donde han estado cuatro meses en una operación de la OTAN.

Don Felipe VI ya fue consciente entonces de las capacidades de las dos unidades más emblemáticas de la base aérea de Morón de la Frontera (Sevilla), además del Eurofighter, el PM-3 Orión. De hecho el Ala 11, que recibe a los pilotos para entrenarlos y formarlos, es la mejor en su categoría «posiblemente de Europa», y la única que tienen tres simuladores lo que permite practicar vuelos con más de un aparato. El Rey se ha montado hoy en uno de ellos.

Esta visita, que forma parte de sus desplazamientos periódicos a unidades militares, empezó a las 10 de la mañana, en la pista central donde aterrizó el avión de las Fuerzas Armadas que traía al monarca. Allí fue recibido por el Jefe del Estado Mayor del Aire (JEMA), teniente general Javier Salto, y tras los honores militares se ha desplazado en primer lugar al Centro de Instrucción donde se forman los pilotos y técnicos del C-16.

Después de este vuelo, al que sólo pudieron entrar una parte de los medios de comunicación por falta de espacio, comentó que este caza, considerado el más moderno del Ejército del Aire español, era «una máquina perfecta» que permitía a España situarse «en la vanguardia» de la defensa aérea. En la base hay unos cuarenta de los modernos cazas Eurofighter (C-16).

El Eurofighter es el avión más emblemático no sólo del Ala 11 sino del aeródromo. Se trata de un caza cuya misión principal es la vigilancia y control del espacio aéreo español y que asume misiones de interceptación y combate con otras aeronaves, ataque a objetivos estratégicos y apoyo a las fuerzas de superficie mediante el ataque a objetivos tácticos tanto en tierra como en el mar, según el Ejército del Aire. Estos aviones forman parte de un escuadrón de combate, similar al ubicado en la base de Albacete, al que se suma otro escuadrón de enseñanza para pilotos de este avión de combate, único en su género en España.

El Ala 11 suma alrededor de 1.500 personas entre oficiales, suboficiales, tropa y personal civil, encargadas tanto de las misiones de vuelo, como de las tareas de sostenimiento y de administración, aunque en la base trabajan un total de 3.200 personas, 2630 forman parte del personal militar (1.800 de España y 830 de EEUU) y 600 son personal civil funcionario y contratado.

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En su visita, el Rey también ha pasado por el banco de motores del Eurofighter, donde se comprueban y revisan las unidades de potencia del considerado como avión de combate más potente del Ejército del Aire español. Después se ha trasladado al Grupo 22, dotado con aviones P-3M Orión, recientemente modernizados y encargados de misiones de patrulla marítima y antisubmarina, así como de misiones de guerra electrónica y de inteligencia, vigilancia y reconocimiento electrónico (ISR).

Junto a uno de los pabellones, estaba este avión de grandes dimensiones y el Rey se ha subido para comprobar personalmente las condiciones técnicas. En la base dicen que es «uno de los mejores aviones que existen con esta función, no en vano llevamos utilizándolo más de diez años». Una de estas unidades está desplazada en Yibuti (Somalia), dentro de la operación Atalanta, contra la piratería marítima.

Para terminar, la visita del Rey, ha incluido un recorrido por el Segundo Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo, una unidad capaz de desplazarse a un territorio y garantizar la protección de las unidades aéreas desplegadas y el transporte aéreo. La Unida había expuesto sobre unas mesas el material de operaciones y armamento, de cuyo funcionamiento, el monarca ha recibido cumplida información. Se ha parado con la Unidad Canina, formada allí por dos mujeres militares acompañadas de sus respectivos perros.