El regreso de un perro desaparecido, el mejor regalo de Reyes

El regreso de un perro desaparecido, el mejor regalo de Reyes. Así ha sido para Dolores Domínguez, una vecina de Arahal que llevaba un mes buscando a Rintin.

Que la noche de los Reyes Magos es mágica ya se sabe. Dolores Domínguez lo ha comprobado este año, por si aún tenía alguna duda. Hace unas hora recibió el mejor regalo que podía desear. Sus hijas le llevaron a Rintin, un perro de raza incierta, que lleva acompañándola unos 9 años y que un buen día, sin saber exactamente cómo, desapareció.

De eso hace sólo un mes pero, como dicen, lo han buscado “por cielo y tierra”. Lo primero que hicieron, como viene siendo habitual, es acudir a las redes sociales para poner el anuncio de su desaparición. La última vez que lo vieron estaba con ellos en un almacén de aceitunas que tienen junto a la entrada desde Málaga por la A92. Después de eso, se esfumó.

Lo han buscado por cielo y tierra

Una vez pusieron el anuncio, comenzaron a recibir mensajes de posibles localizaciones y “allí donde nos decían que lo había visto, íbamos, me he pateado el pueblo y los alrededores, incluso hemos ido a Utrera”, dice una de las hijas María José Sánchez. La madre mientras tanto penaba por saber el paradero de su perro que la acompaña a todas partes.

El día 3 de enero, una persona que conoce a la familia, Eva Medina, les preguntó si había aparecido el animal y les pidió una foto porque creía saber a dónde estaba. Un hombre, José Rodríguez, que vive en el pago de Llano Verde, término municipal de Arahal, lo recogió del campo de feria de Arahal, lugar que está justo frente del almacén de su propietaria. Lo había visto “perdido y desorientado” lo llevó a la Policía Local que tampoco supo darle razón de quien era su propietario y se lo llevó a su campo.

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El mismo día las hijas de Dolores se trasladaron al campo de este hombre para comprobar si el perro que habían encontrado era su Rintin. Y efectivamente allí estaba, bien cuidado y encantado de estar con otros de su misma especie. Estos dos últimos días, lo ha guardado para esperar hasta la noche de Reyes y entregárselo a la abuela.

Lo abrazó y lloró

Dolores Domínguez salió a la puerta de su casa, dentro del almacén, ante la llamada de sus hijas. Cuando le entregaron la caja grande de regalo y la abrió, sólo pudo abrazar a Rintin y llorar desconsoladamente, «no podía parar». Y la familia con ella. Porque los animales se echan de menos como a cualquier otro componente de la familia.

Este mes Dolores lo ha pasado mal, ha estado triste y nombraba al perro continuamente por lo que sus hijas han hecho todo lo posible por localizarlo y que volviera con ellos.

Rintin ya ha vuelto a su casa, con su familia y está en perfecto estado. Ha sido el mejor de los regalos de Reyes para Dolores y para el resto de la familia.