De la euforia a la decepción…en solo cuatro minutos

El Triana remonta en los últimos minutos del encuentro y condena al CD Arahal, que pierde la categoría tras una racha negativa de 10 encuentros consecutivos sin ganar.

A. Solano /AION

El CD Arahal es desde este viernes equipo de Tercera Andaluza. El cuadro de Pedro Illanes acaba de certificar un descenso difícil de creer y asumir por parte de directiva, plantilla y aficionados arahalenses.

Y es que el conjunto del “Manolo Jiménez” tenía como objetivo el ascenso a principios de temporada y ha estado situado en la parte media alta durante buena parte de la campaña.

De hecho, hasta hace menos de dos meses pocos podían pensar que la plantilla blanquiazul pudiera llegar a pasar apuros. Pero una paupérrima racha de resultados desde finales de febrero hasta hoy han hecho que el descenso sea una triste realidad.

Los arahalenses solo han logrado sacar un punto de los últimos 30 (el cosechado ante Ciudad Jardín en la penúltima jornada). El último triunfo fue el pasado 25 de febrero, en la jornada 24, ante el colista: La Puebla de Cazalla. En aquel entonces, el CD Arahal era séptimo con 38 puntos, a solo 5 del ascenso.

Este declive ha hecho que la entidad, tras la victoria de La Campana ante La Barrera, estuviera obligada a sacar al menos un punto en Sevilla ante un necesitado Triana, al que solo le valía ganar para evitar bajar de categoría.

Un objetivo difícil pero que era posible, sobre todo, tras el 0-1 de Guille en el 40 de la segunda parte. Tras una primera mitad igualada y con los dos equipos intentando hacerse con el control del encuentro pero sin apenas gozar de ocasiones de peligro, la permanencia estaba más cerca para los visitantes. Solo había que seguir con la misma concentración y seguridad en defensa para aguantar el marcador durante 45 minutos.

Para ello, el técnico arahalense sacó desde el comienzo una defensa de 5, con Jorge y David Humanes en la zaga y Champi entre los centrales. En los laterales, estarían Jorge Frías y José Julio. La medular fue para Champi y Chori, ayudados un poco más arriba por Tou y Antonio Guisado. Guille quedaría solo en punta.

Imagen del encuentro. Foto: AION

Precisamente, fue el veterano atacante el que más peligro generó hacia la meta rival con un intento de vaselina demasiado flojo que acabó en las manos del guardameta en la primera mitad y con un disparo desde la frontal tras una buena jugada a la contra que el cancerbero trianero también pararía.

Pero, minutos después, no iba a poder atajar el penalti que forzó el propio Guille a 5 minutos del final. Al experimentado ariete no le temblaría el pie y pondría el 0-1 que parecía salvar de manera casi definitiva al CD Arahal.

Sin embargo, nada más sacar de centro, Cristóbal González empataría para el Triana (los defensas arahalenses reclamaron fuera de juego) y, casi sin tiempo de reacción, los blanquiazules se vieron sorprendidos 3 minutos después con el gol de Alfonso Cubero en el 89. Increíble pero cierto. El técnico visitante, expulsado después, reclamaría que el colegiado no permitió hacer cambios en ninguna de las dos jugadas previas a los goles, cuando estos ya estaban solicitados para parar el ritmo del choque.

A raíz del 2-1 poco más se jugaría, produciéndose una trifulca en las áreas técnicas debido a la pérdida de los balones que acabaría con varios expulsados (el árbitro mostró un total de 17 tarjetas en total, de las cuales 4 fueron de color rojo para el Arahal). Incluso el delegado del equipo visitante, Manuel Gómez, acabaría con la camisa rota por parte de un joven que se encontraba detrás de los banquillos.

Con este resultado, solo quedaba esperar una derrota del Espartinas, que jugaba en casa ante el Herrera. Este partido empezó 15 minutos más tarde, por lo que había unapequeña esperanza. No obstante, algunos jugadores blanquiazules ya abandonaban el terreno de juego con lágrimas y con caras de rabia y decepción.

Finalmente, el gol no llegó en Espartinas y Arahal certificaba así su descenso. Ahora toca reflexionar y analizar lo ocurrido, especialmente en este tramo final de campaña. El segundo paso será pensar en el próximo curso y  trabajar para convertir la decepción actual en futuras alegrías.

Ficha del encuentro, AQUÍ