Conflicto vecinal en la calle José María Iglesias por la instalación de una señal de tráfico

Conflicto vecinal en la calle José María Iglesias por la instalación de una señal de tráfico

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Parte de los vecinos de la calle José María Iglesias  de Arahal están enfrentados después de que el jueves, 10 de octubre, instalaran una señal de tráfico que permite estacionar solo a los residentes del tramo de vía sin salida donde está situada. Los hechos, que fueron denunciados por uno de los vecinos en las redes sociales, han desatado la polémica más en contra que a favor de esta actuación, realizada por los técnicos municipales de tráfico para intentar solucionar un conflicto vecinal que dura años a causa del uso de los aparcamiento de dicho espacio. De momento, la medida solo ha servido para dividir opiniones. 

La señal que indica que sólo pueden aparcar residentes es una de las medidas tomadas por los técnicos municipales de Tráfico para dar respuesta a un escrito presentado por parte de los vecinos de este tramo de calle, denominada popularmente los Cortinales de la Iglesia. 

Escrito presentado 

El escrito fue presentado el pasado mes de junio y estos vecinos solicitaban en él la regulación del tráfico en la zona. En su exposición del problema contaban que llevaban 15 años sufriendo la ocupación de la mayoría de estos aparcamientos durante todo el día por parte de coches, tractores y carros a la espera de ser arreglados en el taller. En la exposición, incluían una descripción sobre cómo este vecino reservaba las plazas para que no fueran ocupadas por el resto de habitantes de la calle, poniendo vehículos entre dos plazas, entre ellos una moto, desde primera hora de la mañana hasta el final del día. «Así cuando llegan sus clientes, solo tienen que quitar el vehículo y poner el otro».

Imagen de la calle antes de las medidas tomadas que describen la situación explicada por los vecinos que han presentado el escrito pidiendo su regularización. La primera es de la calle Maestro Godino.

La primera actuación, en respuesta al escrito, fue pintar los las plazas de aparcamientos cuadriculando la zona, pero ésta medida no da el resultado esperado y desde el Ayuntamiento los técnicos deciden colocar la señal, lo que ocurre a finales de la semana pasada. 

Desde ese momento, y con la proyección de la denuncia en la redes sociales por parte del propietario del taller, se ha creado la polémica sobre dicha actuación en la que critican el hecho de que esta señal supone reservar una parte de una calle para aparcamiento propio de los vecinos que viven en ella, algo poco usual en la localidad, aunque ya hay un precedente anterior en la calle Turina.

El vecino denunciante es uno de los propietarios del taller ubicado en esta calle, Felix Luque del Río. Según su exposición en Facebook, él vive ese tramo de calle junto con otros 7 vecinos y, en la mañana del jueves, vio como dos trabajadores municipales colocan la señal de prohibido el paso excepto a residentes. Asimismo, en esta entrada en las redes, también informa de que se habían recogido firmas por parte de vecinos, “no sé si 1, 2 o 3 firmas pero sí sé que todos no”. Y afirma que no tenía conocimiento de estos hechos y tampoco está de acuerdo con ellos.

Imágenes una vez el Ayuntamiento toma las primeras medidas reguladoras que consisten en cuadricular la calle señalizando los aparcamientos.

“¿Es o no legal?”

En ese sentido, reconoce que tiene un taller frente a la calle y ésto “me va a perjudicar pero creo que no es necesario, todos pagamos nuestros impuestos y podemos aparcar en cualquier calle, el tiempo que sea”. Por esta razón, asegura que “me parece vergonzoso que venga algún amigo o familiar a visitarme y no pueda aparcar en la calle porque solo es para residentes”. A su vez afirma que, “solo falta poner en los aparcamientos el nombre o número de cada vecino”.

Consultado por AIONSur, el propietario del taller plantea si ésto es o no legal porque, a su parecer, supone “cortar un calle y favorecerse de un aparcamiento público para siempre, sin pagar nada por ese aparcamiento”. La señal se ha puesto “sin el consentimiento de todos los vecinos” pero, comenta, que “sigo pensando que es absurdo que puedas hacerte dueño de una calle pública”. Por eso lanzaba públicamente un aviso a sus familiares y amigos para que  aparquen en ese tramo de calle señalando a su vez a “un vecino que se sabe de memoria el número de teléfono de la Policía Local”. 

Feliz Luque del Río afirma que “la calle es libre, haya un taller o no y es ilegal privatizar una calle porque hay un taller, desde luego es para reírse, y así tener ellos aparcamientos gratis en su puerta, cuando muchas personas pagan una plaza garaje o cochera. En una de las fotos que subió a las redes, se ve la calle vacía de vehículos después de poner la señal por lo que denunciaba “aparcamientos libres solo para residentes, para cuando vengan puedan aparcar cómodamente y fácil y lo más guay gratis”. Emplazando a las autoridades para que vieran las consecuencias de las medidas tomadas que considera “vergonzosas”.

Estado de la calle una vez colocan la señal de prohibido aparcar para no residentes, publicadas por el propietario del taller.

“Protesta por lo que lleva haciendo toda la vida”

Los vecinos que firmaron el escrito aseguran que “hemos intentado hablar con esta familia durante los últimos años para arreglar la situación sin tener que llegar a estos extremos, pero la respuesta ha sido que llevan aquí 40 años y que somos nosotros los que nos tenemos que adaptar a la actividad del taller”. A su vez aseguran que “no queremos calle privada ni tener preferencia sobre nadie, no hemos pedido esa señal que han puesto, pero tampoco que por el hecho de ser de todos, acabe siendo monopolizada por un vecino para uso privado.”. En ese sentido, insisten en que antes de poner la señal “ya no podía aparcar en esta zona nadie del pueblo porque la situación es la que aparece en las fotografías”. Es, por tanto, un problema “a nivel local”.

Por su parte entienden que “por lo que este vecino protesta es por lo que él lleva haciendo toda la vida, ya que usa la calle en beneficio propio sin tener en cuenta al resto de los que vivimos en la zona”. Y además creen que el problema de tráfico no se limita sólo al tramo de calle sin salida, sino al resto de la vía. Así  es como denuncian que “el propietario del taller no sólo usa todos los aparcamientos del tramo, también los dos que hay en la calle Maestro Godino, donde coloca la moto en medio de las dos plazas para que nadie aparque”. 

A su vez apuntan que la forma de aparcar tanto sus vehículos como los de los clientes del propietario del taller no sólo atenta contra la Ley de Seguridad Vial dentro del casco urbano sino que supone un peligro para el resto de los vecinos. Así es como describen que para salir del polémico tramo  “hay que hacerlo marcha atrás porque este señor aparca su furgoneta mitad en una plaza de aparcamiento mitad en su vado que está justo frente de este tramo de calle por lo que es imposible hacer el giro de frente”.

Otra de las imágenes que presentan los vecinos denunciantes.

«Sus clientes no puede aparcar»

También echan mano de la Ley de Tráfico en vigor para explicar que los vehículos “se han de situar paralelamente al borde de la calzada y de tal forma que permitan la mejor utilización del restante espacio”, algo que en su opinión, “incumple este vecino reiteradamente en los últimos años”, a lo que suman que uno de sus coches lleva “casi un año aparcado en la calle sin moverlo”. Y, además, esta misma ley, junto con el Reglamento de Circulación y las ordenanzas municipales, “prohíben taxativamente las reparaciones en la vía pública”, actividad habitual también en esa calle.

La Policía Local ha ido en más de una ocasión intentando mediar en el conflicto para no tener que sancionar. Y la Asociación de Comerciantes e Industriales (ACIA) de la localidad, requerida por el propietario del taller, ha solicitado una reunión con el delegado de Comercio (Carlos Díaz) “ya que sus clientes no podían aparcar cuando llegaban a su negocio”, según explica su presidente Miguel Lorca que añadió, a su vez, “La asociación no entra si hay algunos problemas personales”. La reunión tendrá lugar esta semana.

En el cruces de acusaciones, el propietario del taller denuncia que los vecinos aparcan en línea amarilla impidiéndole la entrada o salida a su cochera.