Comerciantes de Arahal «desesperados» por las «graves pérdidas» registradas en sus negocios a causa de unas obras

Comerciantes de Arahal «desesperados» por las «graves pérdidas» registradas en sus negocios a causa de unas obras

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Desesperación es la palabra que más repiten los propietarios de comercios situados en la carretera de Villamartín de Arahal. En junio comenzaron una obras para evitar inundaciones en la zona que ha mantenido cortado la mayor parte del tiempo las calles y aparcamientos que dan acceso a los establecimientos. Los empresarios evalúan las pérdidas en miles de euros, a su vez manifiestan el abandono que sufre la zona por parte del Ayuntamiento de Arahal.

Aunque la obra comenzó hace cuatro meses, este sábado 19 de octubre, ha vuelto a amanecer cortada toda la zona de aparcamientos de estos establecimientos, el lado derecho de la calle Villamartín. De manera que los vehículos de los vecinos que venía a hacer la compra se han vuelto o han tenido que acceder por la calle Las Erillas, una vía sin asfaltar que ocupa la parte trasera de la vía principal, donde se llevan a cabo las obras.

Así amanecía la calle Villamartín esta mañana, cortada y sin aparcamientos habilitados.

No lo han hecho por fases

Los comerciantes se quejan porque antes de comenzar las obras, los responsables municipales dijeron que se haría por fases para que el perjuicio a las empresas fuera el mínimo. Según describe José Manuel Navarro, propierario de ‘Cash Navarro’, uno de los negocios que se ha visto más afectado, “desde el primer día metieron la máquina y abrieron toda la calle porque la empresa tiene muchas máquinas pero un solo encofrador y encima se puso malo”.

Para Navarro la palabra que define el sentimiento de los comerciantes es abandono. “Estamos abandonados, cortes continuos de luz, sin aparcamientos para la clientela que pasa y se va, el supermercado lleno de polvo y suciedad”, explica. Al parecer han padecido cuatro cortes de luz de varias horas solo en lo que va de mes, con todo lo que supone para los alimentos que necesitan refrigeración, dos de ellos estaban programados, pero los otros han sido porque una máquina ha dañado unos cables.

El camión de basura pasa por la mañana. “La basura se acumula en la calle Villamartín y el camión llega cuando está abierto y hay coches aparcados con el peligro que supone”. Navarro calcula las pérdidas de su supermecado en unos 80.000 euros, por eso manifiesta que estudia denunciar al Ayuntamiento a la vez que anuncia la creación de una asociación de afectados de la carretera Villamartín.

Los comerciantes denuncian la suciedad de la calle, donde el camión de basura llega en plena mañana.

Abandono

En este sentido se expresa el resto de los comerciantes. Los propietarios de la empresa ‘De la mar al plato’ creen que “la alcaldía de Arahal tiene muy abandonados a los negocios en favor de los centros comerciales, se están cargando a las empresas del pueblo”. Asimismo aseguran que, como esta situación se mantenga en la calle de cara a las fiestas navideñas, “ésto será un infierno y la ruina de más de una empresa”.

Juan Jiménez, propietario de Chiquipark, dice que en esta acera hay más de un centenar de trabajadores que no se están teniendo en cuenta. “Me tuve que poner serio porque no quitaban las vallas de frente de mi negocio, aquí no hay quien pare, estamos abandonados de la mano de Dios”. Uno de los trabajadores de este bar explica que “los trabajadores han hecho lo posible por ayudar a los comerciantes, pero es que la obra está mal planteada desde el principio”.

Por su parte, Diego Duque dice que “la obra no se ha hecho bien desde primera hora, dijeron que la harían por fases y la máquina ha entrado por una punta y ha salido por la otra”. Él reconoce que a su empresa es a la que menos ha afectado porque es mayorista y señala que “los trabajadores de la empresa que han hecho la obra se ha portado muy bien, cuando ha entrado un camión para descargar lo han dejado, incluso ellos mismos han ayudado para que se hiciera rápido”.

Un negocio cerrado tres meses

Así se expresan también vecinos que habían accedido a la zona por la calle Las Erillas. “Tenían que haber planificado mejor la obra, haber habilitado en condiciones esa calle para poder llegar a la zona y no dejarla como está”. 

Uno de los trabajadores de Carrión describe “la que se lió ayer cuando un camión intentó entrar en la calle para descargar, fue imposible y el chaval se fue todo cabreado”. Al respecto añade que “lo único que estaba bien señalizado era la entrada al Mercadona, pero si vienes del pueblo, no hay cartel donde ponga el nombre de cualquiera de estos negocios”. 

Entre todos los testimonios está también el de Pablo Gómez, uno de los dueños de Rialto, una empresa de compra-venta de coches. “Nadie ha salido más perjudicado que nosotros que hemos tenido que cerrar tres meses porque aquí tienen que entrar y salir coches y era imposible, a los otros comercios pueden acceder la gente andando, en este no”.

Los comerciantes también denuncian el descontrol en las señales y los materiales de obra que hay por medio de la calle.

La obra debe terminar el 25 de octubre

Por su parte, Javier Avecilla, concejal de Obras, ha anunciado a AIONSur que el plazo para terminar la obra es el 25 de octubre, es decir, la próxima semana. Invita a todos los comerciantes a dejar su queja en el registro municipal, para que la secretaria decida si “el Ayuntamiento tiene que reclamar a la empresa daños y perjuicios por mala ejecución”.

El edil asegura que está pendiente de la obra y que les están llegando las quejas verbalmente, por lo que recomiendan que entren por registro municipal, “única manera de que la administración tenga constancia”. Además asegura que se la ha dado un ultimátum a la empresa, si no la acaban antes del 25 de octubre “se subrogará el contrato. Y si se le prorroga, ya tiene una grave penalización”.

Con esta situación, la empresa estaba este sábado echando hormigón en la zanja abierta a lo largo de todo el aparcamiento. Las quejas de los comerciantes se han unido la de los usuarios de la vía, una zona comercial que consideran «mal señalizada desde primera hora».