Carcaño: 10 años condenado y sin decir dónde está el cuerpo de Marta

Este jueves 13 de enero se cumplen diez años ya desde que la Sección Séptima de la Audiencia de Sevilla notificase la sentencia correspondiente al crimen de la joven Marta del Castillo, una resolución que condenaba a 20 años de cárcel por un delito de asesinato a Miguel Carcaño, absolviendo de todos los delitos al resto de los acusados, su hermano Francisco Javier Delgado; la novia de éste, María García, y Samuel Benítez, toda vez que ya en 2013, el Tribunal Supremo elevó a 21 años y tres meses de prisión la pena impuesta a Carcaño.

Como publica hoy El Correo de Andalucía, este décimo aniversario llega cuando el Juzgado de lo Penal número siete de Sevilla tiene fijado para los próximos días 26, 27 y 31 de mayo y 2, 7 y 9 de junio de este mismo año, el juicio promovido contra el joven Francisco Javier García, conocido como El Cuco y condenado por un juzgado de Menores por encubrir el citado asesinato la noche del 24 de enero de 2009; y contra la madre de este, por un presunto delito de falso testimonio derivado de sus respectivas comparecencias en el juicio celebrado en 2011 por el citado crimen.

Nuevo juicio

Con la vista en dicha sesión, el padre de Marta del Castillo, Antonio del Castillo, manifestaba recientemente que el Cuco «debe decir la verdad» porque «a él le conviene y a todos nos conviene». Manifestaba asimismo su «esperanza» respecto a que Miguel Carcaño, como testigo en la vista oral, también diga «la verdad». Todo, en alusión a sus diferentes versiones.

Oferta del piso

Al respecto, recientemente trascendía que la familia de Marta del Castillo adquirió hace varios meses la vivienda de la calle León XIII de la ciudad hispalense donde fue perpetrado el crimen. Es un piso de la planta baja de un bloque otrora titularidad de Miguel Carcaño y después de una sociedad inmobiliaria por el impago de la hipoteca. La familia ofreció el mismo al propio Carcaño para el momento en el que acabe de cumplir su condena, a cambio de que revelase dónde fue ocultado el cadáver de la víctima, según revelaba ABC. Sin embargo, todo sigue igual. Si Carcaño no confiesa dónde enterró el cuerpo la condena será más leve, y él lo sabe. Además, si se tardan 10 años más en encontrarlo, el crimen prescribirá. Con esa estrategia, perfectamente diseñada, sigue en la cárcel.