Un «brote de gastroenteritis» que sigue provocando casos en el hotel de Torremolinos

C. González/ Torremolinos (Málaga)

Lunes, 6 de agosto. Es decir, ayer. Estefanía M. deja un comentario en el perfil de opiniones de Facebook del Hotel Marconfort Beach de Torremolinos (Málaga). Es el último de los testimonios de familias que declaran ponerse enfermos en cuanto pasan sus primeras 24 horas en las instalaciones. Vómitos, diarreas, fiebre, fuertes dolores abdominales. En lo que va de verano sobrepasan los dos centenares, sólo en un grupo de WatsApp que se ha formado para denunciar la situación, hay más de 60 representantes de familias que se han visto afectadas por un “brote de gastroenteritis”. Al menos, a esa conclusión ha llegado la Junta de Andalucía después de hacer las inspecciones incluidas en el protocolo de este tipo de situación.

Aunque el brote principal de personas enfermas fue en julio, todavía siguen registrándose casos de huéspedes que han estado en el hotel durante lo que va de agosto pasando sus vacaciones. El citado, es el último que se ha hecho público.

Parte del resto de testimonios se pueden ver en ese mismo perfil de Facebook porque las familias se han unido para denunciar la situación, presentando reclamaciones en el hotel, en la Junta de Andalucía, informes médicos y todo lo que demuestra que ha caído enfermos durante un mínimo de cuatro días a causa de algo, que no precisan, pero que señala al hotel donde han pasado sus vacaciones este verano.

A ellos se han unido otros afectados con los mismos síntomas y, por medio de sus testimonios, se ha sabido que lo que quiera que ocurre en el hotel lleva años pasando.

Desde el día 20 de julio, cuando se conocieron los primeros casos, la Junta de Andalucía puso en marcha los mecanismos de actuación incluidos en el protocolo, según una nota hecha pública hoy. Han realizado estudios epidemiológicos en las cocinas y el comedor del hotel descantando cualquier toxiinfección alimentaria.

Además, dice el comunicado, se ha realizado una investigación medioambiental en agua de consumo y piscina, así como en el sistema de ventilación “en la que no se identificó ningún factor relacionado con estos casos leves de gastroentiritis”.

En la nota ya no se refieren a la cantidad de casos exactamente, aunque en un principio reconocieron a este medio que eran 20. Pero insisten en que se trata de casos “leves”. No obstante, en este periodo de tiempo, una joven que había estado en el hotel durante la primera semana de agosto con su pareja la han tenido que ingresar en el Hospital Santa Elena de Málaga. Y los padres de un bebé de dos meses, que no come en el hotel, tuvieron que acudir con él al hospital durante un día entero para que le hicieran pruebas por temor a que se deshidratara debido a las diarreas y fiebre que empezaron un día después de empezar sus vacaciones en el mismo lugar.

La nota de Sanidad de Málaga apunta también que el Hotel ha seguido todas las recomendaciones de los epidemiólogos en cuanto a medidas higiénico-sanitarias se refiere. Aun así, los responsables del Grupo no encuentran explicación y, aunque no le quitan importancia, sí apuntan que “los casos parecen más de los que son por salir en los medios”, aseguró Neus Tearres, responsable de Comunicación.

La mayoría de los afectados consideran desde un principio que “se ha ocultado la verdad de algo que lleva ocurriendo al menos 10 años”. Uno de ellos envió al grupo una hoja de reclamación que puso en 2008, en la que describe los mismos síntomas que los casos más recientes. Es el testimonio más antiguo que han conseguido reunir.

Se trata de una vecina de Arahal que cuenta en el grupo: “8 años después y sigo leyendo lo mismo, y ocurre todos los años. Estuve allí y aquello es lamentable. Entonces hice una reclamación al hotel e incluso otra en la Oficina del Consumidor de mi pueblo y no hubo ni contestación. Escucho o veo la foto de ese hotel y se me pone el cuerpo malo”.

Los medios de Málaga comienzan a recoger la noticia. Hoy la ha publicado la edición digital de Diario Sur. Y la nota de la Junta de Andalucía ha salido también en varios medios.

Los afectados mientras tanto aseguran que no van a parar porque la experiencia para muchos ha sido traumática. Sobre todo para la familia del bebé de dos meses al que tuvieron que “pincharlo en varios sitios para poder sacarle sangre”. Los resultados han descartado infección en la orina de momento, aunque todavía les faltan algunos por recoger.

Ni en el hotel ni en la Junta saben qué está provocando estos casos de «gastroenteritis», apuntan qué padecen las familias que enferman pero no las causas ni el origen. En los últimos días se ha descartado que sean las aguas fecales del Hospital que hay colindante a la piscina. Pero sea cual sea la causa, no hay testimonios de que afecten a otros hoteles o instalaciones de la zona, de momento.

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