Un 22% de los fallecidos en accidente de tráfico eran usuarios de motocicletas

Según un informe de noviembre de 2015 de la Dirección General Tráfico, no haber pasado la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) ha sido la infracción más cometida por los motoristas

Foto: elcolombiano.com

A.I.

La Dirección General de Tráfico ha publicado en noviembre los datos de la Campaña de Vigilancia y Concienciación de Conductores de Ciclomotores y Motocicletas que ha pasado a las fuerzas de Seguridad del Estado, entre las que se encuentra la más cerca al ciudadano, la Policía Local. Contrariamente a lo que se pueda pensar, no haber pasado la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) ha sido la infracción más cometida por los motoristas, superando incluso al exceso de velocidad. El 22% de los fallecidos en accidente eran usuarios de motocicletas.

Como ejemplo en cifras decir que concretamente 308 motoristas fueron denunciados en una semana por no haber pasado la ITV.

La antigüedad del parque automovilístico de nuestro país -las motos tienen una antigüedad media de 9 años- (Dato – 2014) supone un factor de riesgo en la producción de accidentes, por lo que tener un adecuado mantenimiento del vehículo es esencial para garantizar la seguridad de sus ocupantes y del resto de usuarios de la vía.

El exceso de velocidad y los adelantamientos antirreglamentarios siguen siendo las infracciones más cometidas y más sancionadas.

En el lado contrario se sitúan las denuncias por no llevar el casco puesto. Estos datos y las cifras de siniestralidad son dos de las razones por las que la DGT sigue realizando campañas de vigilancia y sensibilización del uso del casco. Todavía su uso no está generalizado y en numerosas ocasiones es la diferencia entre la vida y la muerte.

En este sentido decir que se debe mantener la vigilancia a través de los controles de alcoholemia y de drogas entre los conductores de motos. En la campaña de vigilancia de carreteras realizadas en España en mayo del 2014, 30 motoristas dieron positivo en la prueba de alcohol, lo que significa que circulaban con una tasa de alcohol superior a la permitida y otros 4 dieron positivo en drogas.

Por último y en lo que a documentación se refiere, es importante tanto mantenerla en regla como estar en posesión del seguro obligatorio del vehículo. En la pasada campaña de vigilancia de motocicletas realizada en España, 228 motoristas han sido denunciados por no tener en regla algún documento referido a la documentación de la moto o del propio conductor y otros 92 motoristas fueron denunciados por carecer del seguro obligatorio, un número superior a los 65 de la campaña del año pasado.

Siniestralidad

Los últimos datos publicados por la DGT, en las Principales Cifras de Siniestralidad en entorno urbano indican que los usuarios de motocicletas suponen el 22% de los fallecidos; en el 42% de los fallecidos en motocicletas no hubo ningún otro vehículo o peatón implicado, y el 40% fallecieron en accidentes con un turismo implicado. En relación a los heridos hospitalizados se observa que el 28% viajaban en una motocicleta y el 11% en un ciclomotor.

Según un informe realizado por el Ministerio del Interior, es importante tener en cuenta el crecimiento en el número y en el uso al examinar las tendencias de accidentes. Comparado con otros modos de transporte, las motos han mostrado un progreso más lento con un -14% de reducción de las víctimas mortales (para motocicletas y ciclomotores) en un contexto de aumento del 17% del parque de vehículos en el período 2001-2008 (IRTAD – datos de UE-20). De hecho, la proporción de víctimas mortales en moto en Europa ha aumentado en comparación con las víctimas de todos los modos de transporte, debido a los mejores resultados logrados por los coches. Los conductores de motocicletas y ciclomotores, representaron el 21% de las víctimas en vías urbanas.

No importa cuánto se mejore el transporte público, probablemente siempre seguirá habiendo una demanda de movilidad individual que puede ser satisfecha en muchos casos por las motos. Sobre todo porque Los beneficios ofrecidos por las motos en el entorno urbano son muchos: uso rentable de la calzada; minimización de la congestión de tráfico; menor espacio de estacionamiento;  menor emisión de gases;  menor coste por viaje (comparado con el coche); y  velocidad de entrega.

Sin embargo, no todo es beneficioso en el uso de las motos. La desventaja más importante es el alto riesgo de lesiones de los conductores y pasajeros en comparación a otros usuarios motorizados. Otra cuestión es la seguridad ya que las motocicletas y los ciclomotores son más vulnerables al robo y al vandalismo.

En Andalucía se ha detectado en lo que va de año un importante aumento de la accidentalidad mortal donde el conductor de motocicleta ha resultado fallecido. Se adjuntan los resultados del período comprendido entre el 1 de enero y el 27 de octubre del presente año en comparación con el mismo período del año anterior.

Necesidad del aumento de la protección

En relación al nivel de utilización de medidas de protección, en el caso de los afectados por accidentes de tráfico en zona urbana, las tablas siguientes ilustran que los porcentajes de uso de cinturón, sistemas de retención infantil (SRI) y casco, por parte de los lesionados, son aún bajos. Los efectos negativos del accidente no se ven reducidos y pudieron afectar a zonas vitales del cuerpo. El caso de los motoristas es el que presenta un porcentaje más alto de uso de elemento de protección, ya que casi el 77% de los motoristas lesionados llevaban puesto el casco en el momento del accidente.

En el caso de los fallecidos, se detecta una menor utilización de dichas medidas, excepto en el caso de las motocicletas. Así, por ejemplo, sólo el 56% de los usuarios de ciclomotor muertos llevaban puesto el casco, y sólo el 51% de los ocupantes de turismo mayores de 12 años fallecidos llevaban puesto el cinturón de seguridad.

Si se analizan las víctimas menores de 13 años, se constata que el uso de cinturón y sistemas de retención infantil reducen de forma muy significativa la mortalidad. En el año 2010 la única víctima mortal ocupante de turismo o furgoneta dentro de este rango de edad llevaba puesto el SRI.